Otra receta de pan para disfrutar metiendo las manos en la masa, nunca mejor dicho, de fácil elaboración y resultado espectacular. No hay que ser un experto en panes para realizar esta corona o remolino como le llama Lorraine Pascale.
He de confesar que soy adicta a Canal Cocina, es mi televisión favorita, si estoy sola en casa solo veo este canal, mea culpa, me tiene enganchada, pero en mi defensa diré que apenas veo la tele, pero cuando la miro siempre es Canal Cocina, jeje y esto viene a cuento de este pan que os traigo, lo hizo Lorraine Pascale en su programa de televisión y por supuesto yo tomé buena nota de la receta.
Es un pan muy sencillo, le he dado mi toque personal, para variar, que ha consistido en añadirle queso cheddar, es un queso que me encanta y le aporta a la masa mucho sabor, no duró demasiado, lo que quiere decir que gusto.
INGREDIENTES:
550 g de harina de fuerza100 g de harina integral2 cucharaditas de sal1 sobre de 7g de levadura de panadería2 chorretes de miel Luna de Miel350 ml de agua templadaSemillas de amapola75 g de queso cheddar ralladoAceite de oliva virgen
PREPARACIÓN:
Si tenéis panificadora o robot amasador podéis amasar en ellos, yo he amasado a mano, me gusta meter las manos en la masa. Ponemos toda la harina, de fuerza e integral y mezclamos en un recipiente amplio, echamos la sal y envolvemos con la harina, en el centro hacemos un cráter para añadir el agua, la miel y la levadura, vamos integrando la harina hasta conseguir una pasta, sacamos del recipiente y amasamos sobre el banco hasta tener una masa elástica, mojaros el dedo en harina y presionar la masa, si se hunde y luego vuelve a su forma original está en su punto.
Estiramos la masa con un rodillo hasta formar un rectángulo, pintamos con aceite de oliva virgen, echamos las semillas de amapola y el queso rallado. Cortamos el rectángulo en seis tiras longitudinales que sean igual de anchas, retorcemos cada tira y luego juntamos por un extremo todas las tiras y volvemos a retorcer. Juntamos los extremos con cuidado formando una corona. Colocamos sobre la bandeja de horno en la que habremos puesto papel sulferizado y volvemos a pintar con aceite, echando de nuevo semillas de amapola y queso rallado. Tapamos con film transparente untado con aceite y dejamos reposar unos 30 minutos en un lugar cálido hasta que doble de tamaño.
Transcurrido el tiempo de levado metemos en horno precalentado a 200º, echamos cubitos de hielo para generar vapor y cocemos nuestro pan durante 30 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla y el resto es cosa vuestra.
Espero que os guste.