Como lo prometido es deuda, aquí dejo la receta del pan naan que acompañó al pollo al ghee de la última entrada. Este tipo de pan es típico de la cocina hindú, parecido al pan de pita en el aspecto y muy esponjoso. La verdad es que a mi me encanta comerlo, pero sobre todo para acompañar el curry. Siempre lo había comprado en paquetes en los supermercados, aunque no siempre lo encontraba, pero ahora que sé que prepararlo es tan sencillo y rápido ya no hay problema en conseguirlo. Salvo por la levadura fresca, seguramente tendréis en casa todos los ingredientes necesarios para prepararlo. La receta que he probado llevaba pasas en la masa, lo que le daba un toque dulzón que hacía contraste con la salsa del pollo, pero no es necesario que las lleve. El pan puede llevar romero, avellanas o ser simple. De cualquier modo está buenísimo.
Pan Naan con Pasas (5 piezas de pan)
Ingredientes:
300g de harina (+ 150g)
125ml de leche templada
7g de levadura fresca
½ cdta de sal
1 huevo pequeño
1 cda de ghee/ aceite de oliva
1 yogurt blanco
pasas
Instrucciones:
1. Lo primero es calentar un poco la leche, no hace falta que esté muy caliente, y añadirle la levadura. Hay que dejarla reposar un poquito, hasta que comience a salir una espumita por encima, lo que no tardó mucho tiempo.
2. En un bol se ponen los 200g de harina con la sal, el ghee, el huevo batido, el yogurt, la leche y las pasas. Para comenzar a mezclar los ingredientes es mejor hacerlo con unas barillas o un tenedor, hasta que vaya cogiendo forma y consistencia. La masa del pan tiene que ser elástica pero no pegajosa, así que hará falta ir agregando más harina mientras se amasa la pasta, pero poco a poco para que no sea demasiada. No pesé la harina que fuí agregando, pero calculo que no fueron más de 150 gramos. Una vez que ya se haya hecho una bola que sea elástica pero no pegajosa toca dejarla reposar para que doble su tamaño. Para ello yo hice un corte en forma de x en la parte de un cuchillo, y la dejé reposar unos 15 minutos en un plato fuera de la nevera.
3. Cuando la masa haya dobledo su tamaño es el momento de precalentar el horno a 200ºC. Para estirar la masa es mejor hacerlo sobre una superficie enharinada para evitar que se pegue, y sobre el tamaño de los panes no hay nada escrito. Los que venden suelen ser grandesito, yo cogí pellizcos de la masa y los hice del tamaño que iba saliendo sin más. La masa se trabaja con un rodillo hasta que tenga un grosor de un centímetro más o menos, o del tamaño que os guste pero sin que sea demasiado grueso.
4. El último paso es meter el pan al horno en una bandeja, yo la cubrí con papel de horno porque así era más fácil sacar una tanda y meter la siguiente sin tener que pararme a coger cada pan por separado con cuidado de no quemarme. Una vez dentro tienen que estar de 6 a 8 minutos por cada cara, dependiendo de la potencia del horno, y se puede dejar que coja un toque dorado. Y tal y como salen están listos para comer.
Y ya que está la receta, quería aprovechar para dar las gracias a las personas que han visitado el blog y sobretodo a los comentarios que he recibido. Espero que las recetas os sean útiles, que os gusten y que disfrutéis tanto como yo con ellas. Muchas gracias.