Este jueves vuelvo con mi serie dedicada a la que me gusta llamar "Publicidad Incómoda" , en la que, cada post, incluyo una muestra de imágenes reales, sin edulcorantes ni finales felices.
Muchas veces, ya sea debido a la ignorancia o a la comodidad, dejamos de ver los efectos que nuestras acciones y las de las personas que nos rodean tienen en el mundo. A veces no somos capaces de leer entre líneas y, otras, simplemente optamos por mirar hacia otro lado porque no nos conviene aceptar la realidad.
Tal como he escrito en el título de esta entrada, los ejemplos que he elegido para este post nos envían un mensaje fuerte y claro: tenemos que estar atentos. Hay que encontrar soluciones y enfrentarnos a los problemas. Tenemos que abrir los ojos antes que la bola de nieve se transforme en una avalancha tan grande, que sea imposible de parar.