Voy a dejar clara una cosa: el relleno es lo de menos. La idea es la importante. Cada uno puede rellenarlo de lo que le apetezca. En mi caso, fueron restos de risotto, a los que le añadi salsa de tomate casera, pimentón, y soja texturizada.
Os dejaré el enlace a dos rellenos que creo que son interesantes, y os dejaré escrita la “Fórmula del huevo” para hacer el rebozado y que quede bien pegado :)
Posibles rellenos:
– Estilo boloñesa con guisantes y maiz
– Estilo boloñesa tradicional, a las finas hierbas
Para los más aventureros y que suelen tener conflictos con las croquetas, esta podría ser una buena opción: hacer el relleno de croquetas, rellenar los pimientos de piquillo, y rebozarlos. Así que os recuerdo un par de recetas de croquetas que podría ir fetén:
– Croquetas de espinacas y queso
– Croquetas de puerro y zanahoria
Falso huevo, para 8 pimientos de piquillo:
– 2 cdtas tamaño postre de harina de garbanzos
– 2 cdtas tamaño postre de fécula o almidón de maíz, también conocida como harina fina de maíz aunque no lo sea.
– 1puntita de cdta de sal negra del himalaya o Kala Namak
– Agua hasta espesar (ojo, espesar, y no licuar. Queremos una textura parecida a huevo batido)
– opcional, aunque innecesario: un poco de cúrcuma
y por supuesto, pan para rallar.
Procedimiento:
1. Mezclamos la fécula, la harina de garbanzos, la sal, y añadimos poco a poco agua hasta espesar.
2. Rellenamos nuestros pimientos con el relleno (que debe ser ligeramente denso. No un mazacote, debe estar jugoso, pero con cierta consistencia) Que al dejar los pimientos de piquillo, aún sin rebozar, en el plato, el relleno no se salga.
3. Una vez estén todos rellenos, ponemos a calentar aceite de girasol en una sartén pequeña. a media altura. No deben curbrir los pimientos, con que nos cubran la mitad tenemos suficiente.
Dato: ¿Por qué aceite de girasol? Porque al aceite de oliva le cuesta mucho subir a altas temperaturas, lo que, a nivel nutricional es genial, ya que su estructura no se ve tan fácilmente alterada. PERO, a la hora de freír las cosas nos provoca que los alimentos enharinados o empanados absorben todo el aceite y, o bien quedan muy aceitosos, o bien se nos quiebra la masa. Friendo con aceite de girasol (que es rico también en ácido oléico) y no reutilizando ese aceite, estará todo bien.
4. Pasamos los pimientos de piquillo por el falso huevo, luego por pan, luego por falso huevo y de nuevo por pan rallado.
5. Cuando el aceite esté muy caliente, freímos por cada lado los pimientos (veréis que se hacen en un momento, al fin y al cabo, el relleno está hecho, y los pimientos ya están asados, solo necesitamos tostar el pan) Los dejamos sobre papel absorbente para que eliminen el máximo de aceite posible.
Et voilà! Ya veis que complicación, cero. Esta idea me la dio, bueno, más que dármela, me la enseñó un buen amigo mío al que adoro :)