
Existen pocos lugares mágicos en el mundo y es un honor que Piriápolis pueda contarse entre ellos!!!!A pocos kilómetros de mi ciudad (Maldonado), se encuentra este balneario cubierto por ese halo de misticismo, magia e intriga como lo es Piriápolis.
Nacido de la mente e ideario de Francisco Piria, Piriápolis alberga aún hoy secretos e historias que ansían ser escuchadas.
Es una ciudad que mira al mar coronada por la Rambla de los Argentinos, centro de atención en temporada alta, y cuidada a lo lejos por el cerro San Antonio, desde el cual se tiene una de las más bellas vistas del este de nuestro país.Ideal para visitarlo en verano y dejarse llevar por la cantidad de turistas, mientras se visitan sus playas; o en invierno dejarse tentar por esa tranquilidad que no cansa sino que fortalece.
Amo ir a Piriápolis en invierno: recorrer la rambla con un buen abrigo, almorzar una "planchita" (foto superior) en el restaurant Yo-Yo; tomar helado por kilo en algún local de la rambla, o incluso sacarme una foto ambientada como a principios del siglo XX. Y ni hablar de las divertidas aerosillas o la visita al Cerro del Toro o al Castillo de Piria!Y quien dice Piriápolis dice "Argentino Hotel". Ese emblemático gigante que cuida las costas de la ciudad, con sus leones y magnífica historia. Nació también de la mente de ese gran hombre como lo fue Piria. Surgiendo en la década de 1930 ya enfocado al turismo de salud, gracias al uso del agua de mar en terapias.

Foto de la FanPage del Hotel
El Argentino Hotel es en verdad único y atemporal, con su magnífico spa y con el centro termal marino, que te permiten disfrutar baños de mar en cualquier época del año. Es sin dudas el lugar justo para ir a reponer energías, descansar, divertirse con las actividades o en el casino.
