Pizza de salchicha y maíz dulce

Reconozco mi devoción por las pizzas. Además es un tipo de preparación que admite mil variantes, como esta que vamos a emplear hoy, y que nace un poco de usar cosas sueltas que tengamos por casa.

Podemos hacerla con varios tipos de masa, más gruesa y esponjosa o más fina y crujiente.

Para esta de hoy yo voy a emplear una masa más bien de tipo pan, tirando a gruesa. Para otro día queda el prepararla más fina y crujiente.

Para prepararla podemos servirnos de aparatos para amasar la propia masa, pero yo soy de la idea de que aquellas cosas que se puedan hacer manualmente, sin que nos supongan un trabajo excesivo, mejor hacerlas así. No sé…como que sientes más lo que estás haciendo, te sientes más involucrado en la preparación de la comida.

Pizza de salchicha y maíz dulce

• Raciones: 8
• Hora: 1h 25mins
• Dificultad: fácil
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Ingredientes:

• 250 g. de harina de fuerza.
• 1 sobre de levadura seca granulada.
• 1 pizca de sal.
• 2 cucharadas de postre de azúcar.
• 90 ml. de agua templada.
• Salsa de tomate casera.
• Salchichas de queso.
• Maíz dulce.
• Queso rallado

Información nutricional por cada porción:

• Calorías: 162
• Proteínas: 4 gr.
• Hidratos: 28,1 gr.
• Grasas: 2,5 gr.

Método de preparación:

• Horneado

Paso a paso:

1. Amasamos en un bol 250 g. de harina de trigo de fuerza con una pizca de sal, un sobre de levadura de panadería y dos cucharadas de postre de azúcar.
2. Añadimos 90 ml. de agua templada.
3. Amasamos hasta que se despegue de las manos y el bol.
4. Pasamos a una mesa y amasamos por 5 minutos más.
5. Hacemos una bola y dejamos reposar por espacio de 1 hora tapada en un lugar cálido.
6. Pasado ese tiempo encendemos el horno a 250º C y amasamos un poco más la masa para sacarle el aire.
7. Colocamos sobre la bandeja donde se horneará la pizza y le damos forma redondeada, procurando no aplanar los bordes.
8. Añadimos una capa de tomate sin llegar a los bordes.
9. Cortamos una salchicha en rodajas y la distribuimos por la superficie.
10. También un poco de maíz dulce.
11. Espolvoreamos algo de queso rallado por encima.
12. La llevamos al horno precalentado a 250 C por espacio de 15 minutos.
13. Sacamos con cuidado de no quemarnos y ya está lista.

Vamos ya con el paso a paso fotográfico:

Empezaremos colocando los 250 g. de harina de fuerza en un bol para trabajar mejor. Es recomendable la harina de trigo de fuerza, ya que su mayor porcentaje de gluten hará que la masa sea mucho más esponjosa. La harina de fuerza es la empleada en panes.

Echamos en un lateral el sobre de levadura seca. También valdría la levadura fresca que se vende en cubitos, pero esta me parece más práctica de almacenar y usar en el futuro.

Vamos a añadir el pellizco de sal procurando que no nos toque directamente la levadura, ya que inhibiría el crecimiento de la masa. La colocamos en el otro extremo del bol.

Lo de las 2 cucharadas de postre de azúcar ya es opcional. Yo las suelo emplear ya que la temperatura de los hornos caseros no suele pasar de 250º C y necesitaríamos sobre 400º C como los de leña para darle un acabado dorado y que no se nos quede blanca, como cruda. De esa forma se nos va a tostar un poco la masa.

Mezclamos un poco todos los ingredientes.

Añadimos los 90 ml. de agua templada, no fría. Lo de los 90 ml. es orientativo, que tampoco hay que tomarlo al pie de la letra.

Vamos mezclando todo bien con las manos hasta que veamos que se despega de las paredes del bol.

¿Entendéis ahora por qué no quiero meterle mano a la Nikon réflex que tengo en casa para sacar las fotos de las recetas mientras las preparo…..?

Tras unos minutos amasando obtenemos una bola que ya no se pega ni a las manos ni a las paredes del bol.

La llevamos a la mesa de trabajo y la amasamos por espacio de unos 5 minutos, dándole vueltas sobre sí misma.

Nos queda una bola perfectamente formada e integrada.

La colocamos de nuevo en el bol, la tapamos y dejamos en un lugar cálido por espacio de una hora, más o menos, o hasta que veamos que dobla su volumen.

Pasado ese tiempo ya vemos como aumentó el tamaño.

Encendemos el horno a una temperatura de unos 250 º C. Colocamos de nuevo la masa en la mesa y la volvemos a amasar un minuto o dos, para sacarle el aire que tiene dentro.

Vamos a empezar a estirarla. Lo podemos hacer con un rodillo sobre la mesa, pero yo prefiero color¡car la masa sobre la bandeja en la que se va a cocinar la pizza y estirarla manualmente, dándole forma con un vaso.

Tras estirarla un poco con las manos, dándole forma redonda empezamos a pasarle un vaso con pareces curvas, de tal forma que deje sin trabajar una zona siempre, la que será el borde más levantado.

Se ve aquí como la curva de la pared del vaso no llega a aplanar toda la masa, dejando más elevado el borde que vamos haciendo llegar hasta los laterales.

Ya nos queda del tamaño y forma final.

Vamos a empezar con la base de salsa de tomate casera que preparamos aquí: Salsa de tomate casera

Debemos aplicar la salsa de tomate desde el centro hacia los laterales, dando movimientos circulares, hasta cubrir la zona que veamos, sin llegar mismo hasta los bordes.

Los voy a demandar por plagio…..solo los que me conozcan entenderán este chiste tan malo. Pasapalabra! ;-)

Cortamos la salchicha, si es de estas de tamaño grueso nos puede llegar con una, en rodajas no muy grandes, de medio cm. o así.

Las vamos distribuyendo por encima del tomate.

Añadimos también algo de maíz dulce.

Y ya, por último, el queso rallado.

Así nos queda justo antes de meter en el horno precalentado a 250º C

….Y así sale 15 minutos más tarde.

Ahora ya solo queda no dejar nada ;-)

¿Y tú….cómo haces tus pizzas?, ¿te gusta más con masa fina y crujiente, o la prefieres de masa más gordita?

¿Qué ingredientes le sueles añadir?, ¿experimentas con lo que tengas por casa o eres de ideas más fijas y preconcebidas?

Todos estos son detalles interesantes que le pueden servir de inspiración a mucha gente, y me gustaría saber vuestra opinión.

Buen provecho, internautas. Nos leemos en la próxima entrada ;-)