Te damos ideas para recuperar y mantener tu figura después de las
fiestas.
Después de los excesos cometidos en una fiesta (comer todas horas, no
dormir, beber algo más de la cuenta...) puede que estés replanteándote algunas
cosas: no picotear entre horas, dejar de fumar, hacer ejercicio... Son nuestros
típicos buenos propósitos para el año que comienza, y está demostrado que
solemos abandonarlos antes de tiempo.
Queremos animarte para que los lleves a cabo. No dejes
que nadie, ni siquiera tu misma, te desmoralice. Unos buenos hábitos
de vida te ayudarán a sentirte mucho más confiada y a gusto contigo
misma. ¡Inténtalo! .
¡Muévete! Es uno de los primeros puntos en la lista que hacemos de buenos propósitos
para el nuevo año y que casi nunca cumplimos. Pero debes saber que
practicar, al menos, tres horas de ejercicio físico a la semana
no sólo te ayudará a recuperar la línea. La práctica de un ejercicio continuado
consigue que mejore nuestro estado de ánimo, gracias a las endorfinas (las
llamadas hormonas de la felicidad) que se liberan; además el cuerpo se oxigena y
mejora la calidad del sueño.
Si eres especialmente perezosa usa la técnica, que combina
aparatología y los cuidados de manos expertas, será capaz de hacer que tu
cuerpo disuelva la grasa y que tus músculos trabajen mientras tu te relajas.
Después de conocer tus hábitos y objetivos se realiza un plan de entrenamiento
adecuado a tus parametros de altura, peso y masa corporal, acompañado de una
dieta equilibrada y personalizada.
Una alimentación saludable también
te ayudará a controlar tu peso y desintoxicar el organismo después de los
atracones de las fiestas. Empieza por desayunar alimentos que te proporcionen
energía suficiente para que no tengas que picar entre horas a media mañana. La
nutricionista Pilar Munné nos
recomienda que no falten proteínas e hidratos de carbono (como una tostada de
pan integral con aceite de oliva y unas lonchas de pavo), lácteos y grasas de
origen vegetal (que puedes ingerir en un yogurt con nueces) y vitaminas y
antioxidantes (que te los aporta un zumo de naranja recién exprimido).
Si lo que te ocurre es que no eres capaz de abandonar el picoteo entre horas,
busca un nutricionista que te haga un plan alimenticio. Este plan de adelgazamiento
personalizado está controlado por una psicóloga que educa al paciente en hábitos
alimenticios saludables. Tu coacher será tu confidente: te ayudará a
reducir el estrés y a diferenciar el hambre producido por la ansiedad del hambre
físico.
Ten en cuenta que tu piel necesita una dosis de hidratación
extra: el alcohol, cuyo consumo suele aumentar en las fiestas,
deshidrata la piel. Si te has propuesto perder algún kilo es muy importante que
hidrates a diario tu piel para que ésta se mantenga firme y elástica.
Por último, ¡deja de fumar! Aprovecha que con la nueva Ley
Anti-tabaco lo tienes más difícil para fumar en bares y otros sitios
públicos, por lo que te costará menos abandonar definitivamente este mal hábito.
Aparte de aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardio-respiratorias o
cáncer de pulmón, el tabaco actúa de forma negativa sobre la piel: apaga el tono
y la luminosidad, fomenta la aparición de manchas y facilita la formación de
arrugas.