Plátanos al licor de naranja

Con frutas podemos de manera fácil confeccionarnos un postre muy rico. Me habían regalado unos plátanos de los que se cultivan por esta zona, a los que denominan “plátanos bastos”. Son más gruesos que los de Canarias y menos dulces. Como se prestaban para hacer esta receta no lo he pensado más y hoy os la traigo, en ella combinados los sabores del plátano y  la naranja, conseguimos un postre muy agradable, que nos puede sacar de un aprieto cuando disponemos de poco tiempo para hacer otros que requieren de más elaboración.
El licor se lo debo a mi cuñado Jose Mª, que hace algún tiempo se ha animado con la destilación de licores obteniendo un resultado excelente. Le agradezco su regalo con esta receta fácil y deliciosa.

Ingredientes:

- Plátanos gruesos 3 (de no disponer de ellos podremos usar los canarios).- Naranja 1, su zumo y su ralladura.- Licor de naranja (Cointreau, Licor 43, Grand Marnier...) 1 copita.- Azúcar moreno 1 cda.- Mantequilla sin sal para asar los plátanos.- Azúcar glas 1 cda.- Almendras laminadas y tostadas.

Elaboración:

 
Lavamos bien los plátanos con su piel, conservando ésta. Cortamos a lo largo en dos y cada mitad en otras dos (de ser canarios hacemos sólo dos mitades). Los asamos en una sartén con un poco de mantequilla, primero tres minutos con la piel arriba y dos más con la piel abajo.

Rallamos la naranja y extraemos su zumo. Ponemos en un cacito y añadimos el licor de naranja y los azúcares. Dejamos que reduzca y espese durante cinco minutos a fuego bajo. Si queréis más jugosidad dobláis las cantidades.
De estar la almendra laminada sin tostar, la tostaremos en la misma sartén que hemos asado los plátanos, ya retirados éstos.
 
Quitamos las pieles con cuidado de no romper los plátanos y los disponemos sobre una fuente de servir.
Regamos con la salsa de naranja y dispersamos la almendra laminada y tostada.
Servimos solos o acompañados de helado de chocolate o nata montada.