La receta de hoy es tan tradicional como sencilla de preparar: Pollo Asado {estilo Joël Robuchon}, donde de lo único que tenemos que estar pendientes es de cambiar de posición al pollo de vez en cuando.
La he preparado para el Reto Cooking The Chef de Octubre que este mes está dedicado a este chef y que él nos comparte en su libro Todo Robuchon.
La receta la descubrí un día que me apetecía preparar un buen Pollo Asado, diferente a como lo había preparado hasta ahora. Aunque podemos pensar que un pollo asado no debe tener mucho secreto, y es cierto, no lo tiene, pero darle el punto y conseguir que se quede todo jugoso, sin que se cocinen demasiado alas y muslos para que el resto alcance un buen punto, o para que las pechugas queden jugosas, esto ya tiene si no secreto, algún truco.
No era la primera vez que lo preparaba siguiendo estos pasos y el resultado, una vez más, ha sido excelente, bien es cierto que no hay mucho donde equivocarse. La carne queda jugosa y muy tierna y la piel dorada, sin tostarse demasiado, una verdadera delicia.
Ingredientes para preparar Pollo Asado al estilo de Joël Robuchon:
- 1 Pollo campero de unos 2.5 kg
- 3 Cucharaditas de sal
- 2 Cucharaditas de Pimienta negra molida
- 2 Cucharaditas de hierbas provenzales, tomillo, romero, salvia o lo que nos apetezca, mejor si son frescas
- 2 Dientes de Ajo
- 25 - 30 gr. de Mantequilla
- Aceite de Oliva Virgen Extra
Cómo preparar Pollo Asado al estilo de Joël Robuchon:
- Sacamos el pollo del frigorífico al menos una hora o dos antes para que se atempere al igual que la mantequilla, ya que la tenemos que utilizar en modo pomada.
- Mezclamos en un cuenco la sal, la pimienta y las hierbas que hayamos elegido.
- Pelamos los dientes de ajo y le damos un golpe para aplastarlos un poco.
- Aplicamos la mezcla de la sal, pimienta y hierbas al pollo, masajeándolo con las manos y la mezcla para que se impregne bien. Ponemos un poco en el interior del pollo, así como los dientes de ajo y una nuez de mantequilla.
- Aplicamos también la mantequilla pomada al pollo, untando toda la piel y asegurándonos que quede bien impregnado.
- Ya tenemos el pollo listo para introducir en el horno que previamente habremos precalentado.
- Lo colocaremos en una fuente de horno que no sea muy grande para que el pollo quede lo más ajustado posible. Previamente, en la base habremos puesto un chorrito de aceite. El pollo lo pondremos apoyado sobre uno de sus laterales, con un muslo y un ala hacia abajo. Lo introduciremos en el horno durante unos 25 minutos a 220ºC.
- A mitad de ese tiempo lo sacaremos del horno y con los jugos que va soltando lo salsearemos, para acabar volviéndolo a introducir en el horno.
- Cuando finalicen los 25 minutos iniciales, sacaremos el pollo y le daremos la vuelta para que quede apoyado sobre el otro muslo y la otra ala. Hay que llevar cuidado en no pinchar al pollo para que los jugos se queden en su interior. Rociamos el pollo con 4 cucharadas de agua y lo volvemos a introducir en el horno otros 25 minutos más.
- Una vez transcurrido la mitad del tiempo, repetimos los pasos de antes: sacamos el pollo del horno y lo salseamos con los jugos que se van acumulando en la fuente. Después, volvemos a introducirlo en el horno. Si vemos que se está tostando demasiado podemos o bajar un poco la temperatura del horno o reducir a 20 minutos el tiempo total.
- Pasados los 25 minutos sacamos el pollo del horno y lo colocamos de forma que el dorso quede hacia arriba. Volvemos a salsear con los jugos y lo metemos al horno otros 15 minutos, esta vez a 210ºC.
- Finalizados los 15 minutos sacamos de nuevo la bandeja del horno y colocamos el pollo con el dorso hacia arriba. Salseamos y volvemos a introducirlo durante 10 minutos.
- En total habremos mantenido el pollo en el horno durante una hora y cuarto. Ahora lo sacamos, tapamos la bandeja y lo dejamos reposar durante 10 minutos antes de trincharlo. Es necesario dejarlo reposar para que no se pierdan los jugos y lo ideal sería dejar el pollo reposando boca abajo, es decir, como si estuviera haciendo el pino. Podemos utilizar un vaso u otro apoyo para que no se caiga. Este paso es opcional, yo no lo dejé reposando en vertical, simplemente cubrí bien la fuente con papel de aluminio y quedó tremendo.
- Transcurridos los 10 minutos ya podemos trinchar el pollo y servir con la guarnición que prefiramos. En esta ocasión lo he acompañado de unas patatas cocidas salteado en una sartén y espolvoreado con cebollino, de espinacas, guisantes y champiñones.