Un día a la semana nos merecemos tener un buen postre y digo esto porque, en mi caso, durante la semana suelo comer fruta o algún lácteo, así que normalmente el domingo hago algo dulce.
Tanto puede ser tarta, como un postre elaborado, aunque a decir verdad muchas veces recurro al postre en vaso, individual, así hago los que necesito y no me quedan "tentaciones" en la nevera. 😉
El queso mascarpone combina muy bien con variados ingredientes, también con fruta, y en esta ocasión el kiwi le hace compañía, lo mismo que unos pistachos a modo de decoración y de complemento en lo que a textura se refiere.
Os comento como he hecho este postre cremoso.
Ingredientes para 4 personas:
250 gr. de queso mascarpone
3 claras de huevo
50 gr. de azúcar
Una pizca de sal
12-15 pistachos
3-4 kiwis amarillos y/o verdes
Poner en un recipiente el mascarpone y batirlo para que quede una masa fina.
Montar las claras a punto de nieve junto con pizca de sal y elazúcar.
Añadirlas al mascarpone en varias tandas, mezclar hasta integrar, colocar el resultado en una manga pastelera.
Pelar los pistachos y trocearlos.
Pelar los kiwis y cortarlo en trozos de bocado.
Montar el vaso vertiendo en el fondo una capa de crema de mascarpone, encima repartir trozos de kiwi alternando los dos colores, cubrir con una nueva capa de crema y decorar con los pistachos troceados.
NOTA: El número de raciones dependen del recipiente en que se sirvan.
** Sabremos que las claras están bien montadas cuando le damos la vuelta al recipiente y no se caen.
** Los kiwis pueden ser verdes o amarillos o ambos, a vuestra elección.
** Los pistachos pueden sustituirse por el fruto seco que más os guste, aunque el color verde destaca mucho en este postre.
** Tengo las preparaciones guardadas separadamente en la nevera, y monto los vasos poco antes de comer.
Celíacos: aseguraros bien de que todos los ingredientes sean sin gluten.