Revista Cine

Presentación de “Jesucristo en el cine” en Marbella

Publicado el 07 enero 2010 por Amendiz @alfonso_mendiz
Hace unos días presenté en Marbella mi libro sobre “Jesucristo en el cine”. Fue un acto entrañable, a la vez que académico, porque asistieron muchos amigos míos: las amistades que hice durante los años que viví en la capital de la costa del Sol, y que me manifiestan su afecto y aún me recuerdan. Por eso digo que fue más un encuentro de viejos amigos que una simple conferencia sobre el tema.
El marco era espléndido: la Sala de Exposiciones del Cortijo de Miraflores, una antigua casa de labor, con molino de aceite y trapiche de azúcar (1706), que fue ampliada un siglo más tarde y embellecida con jardines exóticos provenientes de Filipinas. Tras su rehabilitación, se ha transformado en el Centro Cultural de la ciudad, que de manera continua acoge exposiciones, ciclos de conferencias, proyecciones, etc.
Abrió el acto el Conde Rudi, a quien no veía desde hacía tres años, con unas palabras emocionadas en las que recordó nuestra amistad y algunos de los proyectos que nos unieron hace tiempo. Después habló de la Fundación Escuela y Familia, entidad organizadora del acto, y expuso la finalidad que persigue: ayudar a las familias a que puedan elegir el Centro Educativo que consideren mejor para sus hijos . Después me presentó Ángel Pardo, Director del Colegio ECOS, que se excedió en los elogios, como suele ser habitual en él.
En la conferencia hablé de tres puntos:
- La influencia del cine en las conductas y estilos de vida: la importancia del Séptimo Arte como factor de “socialización” (homogeneización de valores) y de “legitimación” (validación social de comportamientos extraños o rechazables).
- La incidencia de las películas en la creación del “imaginario social” en torno a Jesús. Mucha gente que lee habitualmente los Evangelios ha configurado a través de los filmes su imagen de Jesucristo: su mensaje, su divinidad, su cercanía a los hombres…
- Las películas sobre el Mesías suponen siempre una fuerte “experiencia sociológica”. Para el director no es nunca “una cinta más”, sino una apuesta personal en la que le va la vida, en la que manifiesta sus creencias más profundas o sus dudas acerca de Jesús. Para el actor no es un papel más, sino aquel que marca su capacidad interpretativa y –muchas veces- el personaje por el que será recordado. Y para el público tampoco es “una cinta más”, sino que le marca profundamente.
En síntesis, nadie queda indiferente ante una película sobre Jesús. O mueven a la piedad, a la reflexión, a la conversión interior; o escandalizan a los no creyentes, provocan reacciones airadas en sectores laicistas y son criticados muy al margen de sus valores cinematográficos. Pero esta imposibilidad de permanecer al margen no es algo que suceda sólo con los filmes: aconteció ya, hace muchos siglos, con la predicación de Jesús: movieron a la conversión o a la ira, según los casos, pero a nadie dejaron indiferente. “Quien no está conmigo, está contra mí”.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista