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¿Pueden convivir gatos y pájaros en la misma casa?

Por Jgallego19
¿Pueden convivir gatos y pájaros en la misma casa?

Unos son unos depredadores, y los otros son animales de presa. Cualquiera que haya visto la serie de dibujos animados de Silvestre y Piolín sabe cuál es cuál, y sabe por qué a veces puede ser difícil tener gatos y pájaros bajo el mismo techo. Sin embargo, aunque a veces puede ser difícil, no es imposible que puedan convivir gatos y pájaros en la misma casa.

Si eres de esos que aman ambas especies, no tienes que elegir entre un tipo u otro de mascota. Si tomas las precauciones adecuadas para preservar la seguridad de todas tus mascotas, podrás conseguir que tanto tus gatos como tus pájaros puedan convivir bajo el mismo techo.

¿Por qué tener gatos y pájaros en casa puede ser complicado?

La mayoría de la gente sabe la principal razón por la que los gatos pueden ser un peligro para las aves. Los gatos son cazadores por naturaleza, y cuando ven un pájaro volando, el instinto les incita a atacar. El acecho y el ataque repentino son actos reflejos para los gatos. No creo que un pájaro se sienta seguro sólo porque pueda volar. Hemos visto muchas veces cómo los gatos pueden saltar, atacar violentamente y atrapar a la presa en el aire.

gato acechando a una paloma

Un peligro menos conocido de los gatos es la bacteria Pasteurella que llevan en su saliva. Esta bacteria es en su mayoría inofensiva para los gatos (aunque a veces puede causar infecciones respiratorias o abscesos), pero es mortal para las aves si no se trata rápidamente.

Si tienes un loro grande, puede haber peligro en ambos sentidos. Los picotazos de las cacatúas y los guacamayos pueden ser lo suficientemente graves como para enviar a una persona al hospital, por lo que pueden lesionar gravemente a tu gato. Incluso los loros más pequeños pueden romper la piel lo suficiente como para requerir puntos de sutura.

Entonces ¿cómo puedes garantizar la seguridad de estos dos tipos de mascotas?

Empieza por una jaula de alta calidad

Muchos gatos son adictos a golpear las jaulas de los pájaros baratas y poco consistentes, lo que provoca que, aunque la puerta permanezca cerrada, el pájaro se golpee fácilmente con las paredes de la jaula, y muy probablemente se estrese. Por lo tanto, lo primero que debe hacer es comprar una jaula resistente y robusta, preferiblemente con un buen soporte. Asegúrate de que no tiene puertas correderas que tu gato pueda abrir fácilmente con la nariz o con una pata. Si ya tienes una jaula y tiene una de estas puertas, asegurarla con cinta elástica segura para pájaros o una pinza de madera para tender la ropa puede funcionar para las aves pequeñas. Para los pájaros de mayor tamaño, puedes comprar una cerradura para la jaula (a veces incluso la necesitas también para los pájaros más pequeños que estén especializados en la resolución de puzzles…).

Loro en la jaula

Lo mejor es colocar la jaula en la pared. Esto no sólo hace que el pájaro se sienta más seguro, sino que también reduce las probabilidades de que la jaula sea golpeada.

Deja que el gato y el pájaro se conozcan entre sí.

Algunas personas están completamente en contra de introducir los pájaros a los gatos, e insisten en mantener a sus mascotas en áreas separadas de la casa, y otras personas permiten que su mascotas se mezclen libremente. Otros eligen algo intermedio. En muchos casos, dejar que los animales se vean entre sí es algo bueno, porque entonces es más probable que tu gato aprenda que el pájaro es “su amigo, no comida”. No importa cómo de cuidadoso seas al mantener a tu gato lejos de la habitación donde tienes el pájaro; puede llegar a colarse. Si esto sucede mientras el pájaro está libre fuera de la jaula y tu gato todavía ve al ave como una presa… bueno, no hace falta explicar más; se masca la tragedia si no adviertes la presencia del gato a tiempo.

Empieza lento, y deja que tus mascotas se vean entre ellos desde la distancia mientras que tu pájaro está en la jaula. Si tu pájaro parece curioso o relajado, permite a tu gato que se acerque a la jaula y eche un vistazo más de cerca. Sin embargo, si el pájaro parece estresado, asegúrate de que el gato sigue estando a un par de metros de distancia, y vuelve a intentarlo más tarde. Si tu gato intenta saltar a la jaula o meter su pata entre los barrotes, dile “¡no!” con voz firme o rocía un poco de agua sobre él (o usa cualquier otro método que normalmente usas para hacer que tu gato deje de hacer lo que no debe).

Haz las primeras sesiones de 10 minutos más o menos. A medida que tus mascotas se sientan más cómodas, puedes alargar la duración de las sesiones, y tal vez incluso coger a tu pájaro y sacarlo de la jaula con tus manos en presencia del gato. Haz esto sólo si no hay absolutamente ninguna señal de que el gato entre en “modo depredador” cuando ve al pájaro en la jaula. Si tu gato se agacha como si estuviera preparándose para saltar (acechando) o se le ponen los ojos como platos al ver al pájaro, no lo saques todavía.

gato acechando a un pájaro

Una vez que ambos animales estén preparados, coge a tu pájaro y sácalo de la jaula sujetándolo con tus manos y mantén una estrecha vigilancia sobre ambas mascotas, y estate preparado para reaccionar con rapidez si prevees que uno va a saltar sobre el otro. Sería una buena idea contar con la ayuda de una segunda persona, para sujetar al pájaro mientras el otro sujeta al gato.

Algunas personas prefieren dejar que sus gatos y sus pájaros se acaricien y jueguen juntos, pero hay que tener precaución si se hace esto. No se puede permitir que el gato lama al pájaro para asearlo debido a la bacteria Pasteurella que reside en su saliva, y por supuesto, también tienes que estar pendiente de las garras y los dientes de unos y los picos de otros, que pueden hacer mucho daño. En algunos casos funciona y todas las mascotas son felices juntas y revueltas, pero es tu decisión arriesgar.

Supervisar, supervisar y supervisar

Si sales de casa o por cualquier otra razón no puedes supervisar a tus mascotas, no dejes a tu pájaro fuera de la jaula en presencia del gato. El instinto puede tomar el control incluso en los animales más apacibles, lo que puede provocar que alguien salga herido o incluso algo peor. Además, un gato puede aplastar a un pájaro o puede causarle un simple rasguño demasiado pequeño como para apreciarlo, pero lo suficientemente grande como para provocarle una infección letal. Si piensas que tu pájaro podría haber sido arañado por tu gato, llévale al veterinario inmediatamente. Los arañazos y las mordeduras necesitan ser tratados con antibióticos, y es necesario que se actúe de inmediato.

Al igual que las personas, los animales tienen diferentes personalidades. Los gatos y los pájaros a veces pueden llegar a ser los mejores amigos, pero no siempre funciona así. Nunca te puedes fiar de algunos gatos cuando están cerca de un pájaro, no importa cuánto trates de entrenarlos (en esos casos, mantener a ambos animales en distintas partes de la casa asegurándote de que les prestas la misma atención es lo mejor). Algunos pájaros siempre son cautelosos con los gatos, y a veces incluso podrás encontrarte con un gato que tiene miedo de las aves. Tu objetivo principal debe ser conseguir que tus mascotas se toleren entre sí, y reconocer que todas son miembros importantes de la familia.


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