Resumen: Nuestros instintos dirigen nuestra conducta en circunstancias especiales, pero ¿pueden verse estos modificados por una neurohormona?, ¿Puede que haga que seamos más fieles a nuestra pareja?
El conocimiento sobre la genética permite obtener información sobre cómo se transmite (genotipo) de padres a hijos, y cómo ésta se expresa conformando un hombre o una mujer (fenotipo), existiendo ciertas tendencias asociadas a uno u otro sexo, datos que provienen más de la investigación con otros mamíferos que con humanos. Pero si nos ceñimos estrictamente a los instintos, existen dos básicos que todos heredamos y que únicamente se “activan” cuando se dan las circunstancias adecuadas para ello, como son el instinto de supervivencia del individuo y el de conservación de la especie.