Cuidado con la piel de los más pequeños!!Según la Skin Cáncer Foundation, tener ampollas como consecuencia de una quemadura solar cuando se es aún un niño duplica el riesgo de posibilidades de desarrollar un melanoma en la edad adulta. Por eso, si la protección solar es una cuestión a tomar muy en serio para los adultos, aún lo es más para los niños ya que su piel es mucho más delicada y está más expuesta a los daños que puede causar el sol en la piel.En este sentido, y a pesar de que recordamos que los bebés y niños menores de 3 años no deberían estar expuestos directamente al sol, es aconsejable utilizar un factor de protección elevado (mínimo 30) y aplicarles la crema solar al menos 15 minutos antes de que vayan a estar expuestos al sol. Además, recomendamos usar un protector solar como P20* que los mantenga protegidos durante mucho rato - hasta 10 horas- sin necesidad de ir renovando la aplicación.Por último es importante considerar todas las precauciones- siempre serán pocas tratándose de una piel tan delicada como la de los niños- como por ejemplo evitar la exposición directa al sol entre las 12 y las 16:00 de la tarde, cubrir la cabeza con una gorra, procurar tener siempre alguna sombra (sombrilla) para que no estén expuestos de forma directa al sol, usar cremas hidrantes después de la exposición solar, son sólo algunos de los consejos a tener en cuenta.
*Todos los ingredientes de los productos P20 están aprobados como ingredientes cosméticos y no contienen colorantes, parabenes u otros conservantes, todo ello hace que sean seguros para una piel tan delicada como la de los niños.