Las recetas de la mamá te recomienda que elabores este postre tan espectacular como es la bomba de la selva negra. Si quieres sorprender realmente a tus invitados, ofréceles esta sofisticada bomba: una montaña de helado cubierta de chocolate fundido aromatizado al kirsch.
- 600 g de helado de vainilla
- Para el helado de cereza:
- 250 g de cerezas oscuras deshuesadas frescas (o en almíbar)
- 220 g de azúcar en polvo
- 3 Claras de huevo
- 300 g de nata montada
- Para la cobertura:
- 100 g de chocolate amargo para fundir2 Cucharadas de Kirsch
ElaboraciÓn
Prepara el helado de cereza: tritura 200 g de cerezas. Disuelve el azúcar con una taza de agua en una cacerolita. La pones al fuego y cuece el almíbar, sin removerlo, durante unos 10 minutos.
Bate las claras a punto de nieve y mézclalas con el almíbar. Remueve hasta obtener un compuesto espeso. Incorpora las cerezas trituradas y la nata montada. Pica las cerezas restantes en pedacitos y agrégalas al compuesto. Échalo en un bol con las paredes bajas e introdúcelo en el congelador para que se enfríe. Sácalo entonces, remuévelo bien y mételo de nuevo en el congelador.
Forra un molde frío para budines con el helado de vainilla. Congélalo para que se endurezca. Coloca el helado de cerezas en el centro del molde, nivela la superficie, tápalo y vuelve a guardarlo en el congelador.
Destapa el molde y pincha la bomba con una broqueta para crear una “salida de aire” y poderlo sacar mejor del molde. Cubre este último con un paño caliente y vuelca la bomba en una fuente. Métela en el congelador.
Para la cobertura: funde el chocolate al baño María y mézclalo con el Kirsch, déjalo enfriar y viértelo cobre la parte superior de la bomba. Lo dejas en el frigorífico hasta que vayas a servirlo. Consejero-
Puedes cubrir esta bomba de helado con chocolate blanco.
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