Las recetas de la mamá te aconseja que elabores estas deliciosas pechugas de pollo gratinadas. Este plato de pechugas de pollo gratinadas están servidas con salsa de tomate, completadas con queso mozzarella y gratinadas, resultan muy sabrosas.
Este plato perfecto para todos los comensales como plato único, pero también es ideal para los más pequeños que les cuesta comer carne, junto con el queso y el tomate les encantará.
1 HORA
MEDIO
FÁCIL
4 PERSONAS Ingredientes
- 8 Pechugas de pollo
- 2 Dientes de ajo
- 1 Cucharada de mantequilla
- 3 Cucharadas de aceite
- Una cebolla picada
- 400 g de tomate triturado
- 2 cucharaditas de azúcar
- 1 Cucharadita de orégano
- Una pastilla de caldo de pollo
- 150 g de mozzarella cortada en lonchas
- Pimienta negra molida
- Sal
- Aceitunas negras y menta para decorar
ElaboraciÓn
Condimenta las pechugas de pollo con ajo, sal y pimienta. Funde la mantequilla en una sartén y añade la cucharada de aceite y el pollo. Cuando esté frito, lo pones en una cazuela.
Calienta el aceite restante en una cacerola, agrega la cebolla y la fríes. Añade el tomate triturado, el azúcar, el orégano, la pastilla de caldo de pollo, sal y pimienta, y lo cueces a fuego lento durante 15 minutos.
Precalienta el horno a 180ºC. Cubres las pechugas de pollo con la salsa preparada, tapas el recipiente con papel de aluminio y lo metes en el horno unos 25 minutos.
Sacas el pollo del horno y lo cubres con la mozzarella. Lo introduces de nuevo pero solo con el gratinador, hasta que el queso se haya derretido. Lo adornas con aceitunas negras y menta. Consejero-
En lugar de mozzarella puedes usar otro queso como holandés o gruyère
La Mamá [email protected]