Muchas personas acuden a mí buscando su pasión, su propósito. Quieren reinventarse, porque tienen trabajos que no les gustan, no les hacen sentir felices o realizados. Pero no lo tienen tan claro: ¿a qué me dedico, qué es lo mío, en qué soy bueno?
Es algo totalmente normal. No nos han enseñado desde pequeños a reconocer nuestros dones y talentos. Todos nacemos con ese talento potencial que podemos desarrollar y ser más felices o dejarlo de lado y vivir una vida ajena que no es la nuestra.
Lo que sentí el otro día al terminar una sesión de Coaching
Hoy quiero contarte algo que me sucedió el otro día, al terminar una sesión de mentoring con uno de mis clientes. Eran casi las 21:00 de la noche, había estado trabajando todo el día: dos sesiones por la mañana y otra por la tarde.
Lo reconozco. Casi todas mis sesiones son intensas, tocando la parte más profunda de las personas: sus sueños, sus anhelos, su alma... Cuando llegas a ese nivel de conexión con tus clientes, te das cuenta de todo el potencial que escondemos todos y cada uno y a menudo lo olvidamos o simplemente no lo sabemos ver.
Siempre termino mis sesiones cansada físicamente, porque doy el máximo de mí durante esa hora, hora y media. Dejo de existir en esos momentos como María, me convierto en un canal, algo mágico sucede: me conecto con la intuición y de repente fluye algo muy bello, algo muy auténtico, que incluso no sabría explicar con palabras.
Lo curioso es que no sólo ocurre en sesiones de coaching puro (que sería como el auto-descubrimiento en el sentido más puro), sino también en las de mentoring. De repente fluye la creatividad entre los dos, nuevas ideas, emociones, miedos que se convierten en oportunidades de cambio.
Así, el otro día, al terminar mi sesión de mentoría, en un día caluroso de agosto, cansada después de las 3 sesiones que había tenido, varias grabaciones que realicé para un programa que estoy preparando... me dirigí a comprar a un supermercado, ya que no había tenido tiempo de hacerlo en el día.
Me metí en el coche, con una sensación muy positiva, de haber hecho las cosas bien, de haber contribuido, de haberme cansado de forma muy agradable.
Al llegar a casa, mientras sacaba las bolsas de la compra, me invadió una sensación de gratitud inmensa. Y de repente me di cuenta de algo valoraba más que nada en mi vida y mi trabajo: ¡son las personas!
Es algo que siempre supe y cuando te embarcas en un proyecto sabes que te gusta tratar con personas, si no, no empezaría esta carrera del coaching personal.
Pero en ese momento se produjo una especie de insight: ¡wow, son las personas!
Empecé a acordarme de todas esas personas que se cruzaron en mi camino en los últimos años. Todas que conocí, con sus vidas, sus situaciones, algunas de lugares tan dispares, como una de mis clientes del Sendero de Tus Sueños con la que pasé a trabajar en una mentoría después y con la que me vi en persona el otro día en Madrid. Ella viene de América Latina y pese a no habernos visto nunca en personas, hemos generado tal confianza, que es sencillamente mágico.
Haber podido cenar con ella, conversar, verla, poder abrazarla... es una sensación preciosa. Al despedirme de ella, me invadió una sensación muy similar de nuevo: plenitud, gratitud, realización.
Tanto en los cursos como en mis sesiones individuales trabajo con personas: personas auténticas, valientes, aunque aún no lo saben, llenas de talentos, de capacidades inmensas... poder estar cerca, acompañarles, escucharles y guiarles a que consigan sus sueños y se realicen es mi propósito.
¿Es lo mismo Pasión, Vocación y Propósito?
Puede que tú también estés buscando tu propósito en estos momentos. ¿Y si tu propósito fuera trabajar con personas? Si es así, ya lo tienes. No busques más. Si te gusta la gente, si te apasiona escuchar sus historias, saber de sus vidas, hay muchas formas de ayudarles.
Y es que no es lo mismo pasión, vocación que propósito.El propósito es algo que va más allá de ti mismo. Es algo que tiene que ver con la trascedencia, con cómo afecta tu vida a la de otros, de la sociedad, del planeta.
Por ejemplo mi propósito es ayudar a personas a ser más conscientes de sí mismos, a aprender a ver su potencial, su luz interior, su grandeza.
El cómo hacerlo puede ser de muchas formas: a través del coaching, psicología, PNL, escribir libros, tener un canal en Youtube, a través de la música (ser un cantautor, por ejemplo), dando conferencias, charlas, enseñando en un colegio, escuela, etc.
Dice Laín García Calvo que tu propósito viene de tu mayor desafío. En mi caso, yo he tenido mi luz apagada toda mi vida hasta que desperté y empecé a creer en mí misma. Así que mi propósito es ahora enseñar a los demás a encontrar esa luz en sí mismos.
Por supuesto si el propósito lo unes a tus dones y talentos, a lo que te apasiona, tienes el cóctel perfecto para saber en qué puedes especializarte.
¿Cómo descubrir en qué puedes reinventarte?
- Haz una lista de todos tus talentos, naturales y aprendidos. Si no lo ves claro, pregúntale a personas cercanas.
- En cuanto a tus pasiones, obsérvate. ¿De qué hablas con pasión en tu día a día? ¿Qué te llama la atención, qué te obsesiona? ¿Qué lees, qué ves, qué miras en Internet con frecuencia?
- Detente a analizar tus 4-5 principales valores en la vida.
- Ahora reúne toda esta información y podrás ver que te salen cualidades que podrían servir para determinadas profesiones.
Ejemplo:
-
Mi propósito es ayudar a personas a amarse a sí mismas.
-
Mis talentos son la escucha, la empatía, la intuición y el compartir desde la experiencia
-
Mis pasiones son compartir con otros lo que descubro de mi desarrollo personal, el crecimiento personal y la espiritualidad
-
Mis valores son la libertad, la realización, la conexión conmigo misma y el amor.
-
Profesiones posibles: coach, psicóloga, escritora del desarrollo personal, conferenciante, formadora, profesora, orientadora profesional, recursos humanos, filósofa...
Si tienes dudas todavía con respecto a esa profesión ideal para ti, te recomiendo realizar mi Curso MailCoaching que han adquirido más de 200 personas hasta la fecha. Un curso basado en el auto-coaching para descubrir sus talentos, pasiones, crear su marca personal y además trabajar de paso tu confianza en ti mismo, la autoestima y vencer tus principales miedos.
Descubre en este test si tienes madera de Coach
Muchas personas con las que trabajo descubren que les gusta mucho el desarrollo personal y se preguntan si la profesión de coach podría ser para ellos. Si eres de esas personas, te propongo un sencillo test.
Responde a Sí o No a las siguientes preguntas.
Si dudas, piensa si es más bien un sí o más bien un no. Si no lo tienes tan claro, entonces descarta la pregunta (sería un No).
- ¿Tienes una mente abierta?
- ¿Te consideras una persona observadora del comportamiento humano?
- ¿Sueles captar con facilidad en qué son buenos los demás?
- ¿Te fijas en rasgos de personalidad de otros que la mayoría no capta?
- ¿Te gusta hablar con personas?
- ¿Atraes a personas que te cuentan sus problemas?
- ¿Algunas personas cercanas te confían sus secretos?
- ¿Te piden consejo a menudo sobre algún tipo de situaciones?
- ¿Se te da bien escucharles sin tratar de darles tu opinión siempre?
- ¿Eres capaz de ponerte en la piel de otras personas?
- ¿Te consideras una persona sensible?
- ¿Te afecta el dolor ajeno?
- ¿Te cuestionas a menudo tu propia vida?
- ¿Tu cabeza siempre está buscando soluciones nuevas a problemas cotidianos?
- ¿Eres una persona curiosa por naturaleza?
- ¿Eres una persona respetuosa con los demás?
- ¿Eres capaz de dejar de lado tus propios juicios a la hora de escuchar al otro?
- ¿Eres una persona adaptable al otro, antes que directiva?
- ¿Te gusta comunicar y compartir lo que vas aprendiendo?
- ¿Tienes una sed inagotable de saber más y más sobre el desarrollo personal?
Al final te propongo sumar los Síes que has obtenido. Si tienes más de 10 respuestas con el Sí, el Coaching podría ser para ti.
La mejor manera de saber si es algo a lo que te gustaría dedicarte es pasar tú mismo por un proceso de coaching, vivirlo en primera persona.
Te propongo mi curso MailCoaching para descubrir tu pasión y reinventarte. Más de 40 ejercicios de coaching, PNL, Inteligencia Emocional y Escritura creativa para conectar con tu esencia, valores, aumentar tu autoestima, confianza y cambiar tus creencias que te sabotean.
Algunas personas después de realizar este curso se dieron cuenta de que quieren dedicarse al coaching de manera profesional.
Aunque para mí lo más bonito del coaching es poder trabajar de tú a tú con personas, tocar la parte más bella de cada ser humano: sus sueños, sus anhelos, su pasión, su realización y su espiritualidad.
Ahora por fin sé que estoy en el camino correcto.
PD: Te prometí esta semana contar cómo una secta intentó captarme. Aún no tengo preparado este post. Pero espero traértelo próximamente.
PDD: Por último, me gustaría que comentaras más abajo si te has dado cuenta de si el Coaching podría ser la profesión ideal para ti (si has realizado el test sobre todo). Y si ya eres Coach, me encantaría que compartieras con todos por qué decidiste dedicarte a esta bella profesión. Así ayudas a personas que se lo están pensando a ver otros puntos de vista.