Relajación y bienestar

Últimamente he andado muy metida en el estudio del estrés, es algo tan básico pero a la vez tan desconocido. Les podrá sonar a tontería, conozco gente a la que el doctor les da diagnóstico de estrés y salen mentando madres del doctor, pero es real.
Imagínense que van por la calle caminando normalito y de repente de una esquina les sale un león y los empieza a perseguir. Ustedes se echan a correr y todo su cuerpo va a responder, van a liberar diversas hormonas, van a suprimir funciones secundarias (como ir al baño o tener hambre) porque toda su energía va a estar concentrada en escapar. Total que el león se va, ustedes se relajan y siguen su camino. El cuerpo está preparado para esto, que horror que te persiga un león a media calle pero el cuerpo puede con esto. Ahora imagínense vivir en esa carrera contra el león todo el día, todos los días. ¿Creen que el cuerpo está preparado para esto? Definitivamente no.
El cuerpo lo resiente porque hay funciones que deja de lado y ya no hace bien, estamos cansados, con malestares inexplicables e incluso puede ser que hasta deprimidos.
Además, el cerebro controla todo lo que hacemos, al estar en estrés y con las hormonas por todos lados, es muy probable que tengamos altos el colesterol y los triglicéridos. Curiosamente, comprobado, en estrés se nos antojan más las cosas panosas o las cosas dulces y a 2/3 de la gente les da por comer de más en estrés. A esto súmanle que estas mismas hormonas nos hacen acumular más la grasa en el área abdominal... hagan ustedes la suma de los factores. ¿Vale la pena todo esto?