Así varias personas van a concurrir a este hospedaje, sin embargo uno de ellos es asesinado, y lo peor de todo es que nadie puede abandonar el lugar porque una enorme tormenta se desató y seria casi un suicidio aventurarse al exterior (esto me recordó mucho a el Resplandor de Stephen King) ante la noticia del asesinato, un policía debe llegar al lugar para así custodiar y cuidar de que no ocurra otra tragedia.
Lo bueno que tiene esta historia es que al estar encerrados en aquella casa, el asesino indudablemente encuentra encerrado con ellos, y no sabemos quien es sino hasta el final.
Los inquilinos tienen diferentes personalidades, lo que hace la lectura más entretenida, porque vemos cómo toman esa situación tan peligrosa.
Agatha Christie, hace que dudemos de todos. Todos nos transmiten desconfianza, y personalmente no pude identificar al asesino antes de su revelación.Esta fue una lectura muy entretenida que disfruté de principio a fin.