39 cafés y un desayuno· Lidia Herbada
Espasa· 238 páginas39 cafés y un desayuno (1/1)
Martina es una chica treintañera sin suerte en la búsqueda del amor perfecto hasta que su hermana decide tomar cartas en el asunto. Pero estamos en el siglo XXI y el amor ya no está en el aire, está en la red. Para encontrarlo, sólo hay que armarse de una buena dosis de paciencia, unas gotas de chispa y un ordenador con los megas suficientes para que no se quede colgado en el momento cumbre.
Cuando el mundo virtual se convierte en realidad, Martina pensará que sus citas son como los cafés: a veces cargados, otras espesos, cortados o descafeinados. ¿Encontrará el café perfecto, el que se sirve con un delicioso croissant y zumo de naranja?
Opinión personal
Lo primero en lo que me fijé de este libro es en su edición. Me recordaba muchísimo a La felicidad es un té contigo e incluso llegué a pensar que era una continuación o una historia relacionada con este libro de Mamen Sánchez.La historia nos cuenta como la hermana de Martina actuará como una autentica celestina, con el propósito de encontrar la pareja perfecta para su hermana, que ya ronda más de treinta primaveras, y después de relaciones inútiles deciden emprender la búsqueda mediante uno de los métodos más utilizados hoy en día: en la red. ¿Conseguirá Martina encontrar su media naranja?
Me hizo mucha gracia el tema que desarrolla este libro, ya que es un tema que abunda entre las escritoras españolas, y aunque desde un principió pensé que iba a detestar este género, acabé sorprendiéndome en alguna ocasión, llegándome a gustar estas historias. A pesar de ser un tema totalmente relacionado con el amor me pareció original la idea de buscar la pareja perfecta en internet, algo muy de moda últimamente, así que me dije ¿Por qué no?Si bien no resultó ser lo que me esperaba, me ha gustado bastante. La introducción está bien. En ella la hermana de Martina nos cuenta los planes que tiene para su hermana, y después comienzan las miles de citas que sufre la pobre Martina (porque algunas me hacía sentir mal hasta a mí, como la ocasión en la que su cita puso la típica escusa de olvidar la certera en los otros pantalones, y tener que pagarlo ella todo).
Hubo un momento en el que decidí dejar el libro, porque tantas citas y tan desastrosas llegaron a aburrirme mucho, así que decidí abandonarlo. Pero cada vez que intentaba leer otro libro tenía un sentimiento de culpabilidad por no haberlo terminado (defectos del lector jajajaja) así que lo terminé, para mi sorpresa fue mucho más fácilmente de como había empezado, ya que la historia comenzó a ganar velocidad y las citas eran cada vez mas enrevesadas e intrigantes.
en el amor y a punto de darse por vencida en ese campo, y su hermana, una chica al parecer divertida, aunque para mi gusto demasiado entrometida en la vida de los demás, aunque sea su hermana. No olvidemos a los muchos chicos interesados en conocer a Martina, desde frikis del mundo del cine hasta guaperas que se hacen todos los días las planchas y una tabla de ejercicios para tonificar los bíceps.
La pluma de Lidia es típica de esta clase de historias. Fácil de entender, para nada pesada y muy rápida de llevar. No os confundáis. Lo que me hizo abandonarlo fue la trama, no la escritura de su autora. Es más, me ha gustado mucho y me gustaría leer algún libro más de ella.
Resumiendo, 39 cafés y un desayuno puede ser al principio un libro difícil de seguir, pero a medida que avanza la trama te vas interesando por el final que le espera a Martina y te preguntas si acabará encontrando a su media naranja o tendrá que conformarse con una vida de soltera pero rodeada de la mejor familia y amigos...
Puntuación final
¿Qué me decís? ¿Lo leeréis? ¡Contadme!