*Editorial: Punto de Lectura
*Páginas: 373
*Géneros: Erótico
*Precio: 6,00€
Libro único
Él es un arrogante hombre de negocios que siempre consigue lo que quiere. Y lo que quiere es que Genevieve pase los próximos noventa días sometiéndose a cada uno de sus deseos...
Gracias a Punto de Lectura por el envío del ejemplar
Tengo que aprender a no dejarme llevar por las portadas. Eso fue lo que me sucedió con este libro. Cuando vi la portada tan sencilla, con ese fondo negro degradado, el título en blando y esa frase enmarcada en un círculo donde dice "Te encantará si te gustó Cincuenta sombras de Grey", me dije que quitando esto último, era un libro único que sería rápido de leer y que podía contener una historia interesante. Craso error, ya que es un libro erótico muy cargado de tópicos.
Todo comienza cuando Genevieve, una publicista, conoce a James Sinclair, un guapo y millonario hombre de negocios que está interesado en invertir en la agencia donde ella trabaja a cambio de tenerla noventa días cumpliendo todos sus deseos. Para Genevieve el trato es sencillo: ella le da lo que quiere y el plasma su firma en el contrato, concediéndole un enorme reconocimiento a ella y a la compañía y garantizándole un más que seguro ascenso. Pero lo que ella desconoce, es que esos noventa días le servirán para descubrirse a sí misma y admitir todos esos deseos que no sabía que poseía.
Así empieza el libro, con la entrevista entre Genevieve y Sinclair para conseguir un jugoso contrato publicitario y ahí, directamente, comienza la acción. No hay páginas previas donde se nos narre un poco la vida de ella antes de ingresar en la compañía, ni cómo consigue la cita con Sinclair ni nada por el estilo. Lo primero que nos muestra la autora en el manoseo de Sinclair y su propuesta. He aquí mi primer pero, ya que me pareció muy brusco que el libro comenzara así, por muy erótico que sea. Me hubiera gustado saber cómo Genevieve consiguió su puesto, o cómo llegó hasta Sinclair o qué clase de propuesta publicitaria le muestra para convencerlo de firmar con su compañía. Ha sido demasiado directo y me costó mucho seguirle el hilo a la trama.
Los siguientes capítulos tampoco tienen un trasfondo más allá que los primeros encuentros sexuales de la pareja. Unas escenas que poco me recordaron a 50 sombras y que poco me gustaron, ya que la descripción es algo mala en este sentido. No busquéis secretos oscuros, pasadso turbulentos o parejas locas porque no las hay. Es un libro bastante simple en este sentido: dos personas que mantienen relaciones algo peculiares, pero es sólo sexo.
Estuve a punto de abandonar su lectura varias veces, lo reconozco y ¿por qué?, pues porque Sinclair me cayó mal desde un principio. Es el típico hombre arrogante, mandón, ególatra y asquerosamente rico que suelen aparecer en la temática erótica, pero es que Sinclair no es así porque la vida lo trató mal o porque en su pasado hay hechos traumáticos, de eso nada, es así porque es rico y porque le da la gana. Se sabe guapo, tiene un cuerpo de adonis y el dinero suficiente como para no trabajar más en su vida y legarle el mismo futuro a sus hijos, nietos y bisnietos, así que puede permitirse ser un egocéntrico y que sus palabras sean seguidas al pie de la letra. Su protagonista, Genevive, también me pareció tonta en la gran parte del libro, ya que siempre termina haciendo lo que Sinclarir quiere, aunque ella no esté de acuerdo o no le guste lo que le propone. No sé, eso de someterte a un hombre porque te promete firmar un contrato me recuerda a una forma distinta de prostitución (y ojo, que no quiero herir sensibilidades, pero es a lo que me recuerda).
Me obligué a continuar con la lectura, ya que me negaba a que éste fuese el primer envío editorial que abandonaba y, por cosas que aún no consigo explicarme, lo acabé. Tiene tantos y tantos tópicos que me pareció estar leyendo varios libros a la vez, aunque hay que tener en cuenta que este libro se escribió en los años noventa, así que su contenido, en su tiempo, si podría haber sido bastante revolucionario.
Hubo varias escenas que se me atragantaron porque me parecieron denigrantes, aunque la autora narre que a Genevieve le gustan. A mi me pareció mal que las empleara en un libro, ya que es fomentar algo que hoy día es una lacra social. ¿A qué viene idear una escena donde ella es atada a una moto y varios tíos le pegan porque el señorito le exige que pida cuando quiere mantener sexo? Y, aunque se queja y pide que paren, parece que al final le gusta. Puede que sea una práctica sexual que guste ( existe el BDSM), pero a mi sigue sin convencerme leerlo en un libro.
Lo único que se salva es la pluma de la autora; eso sí, cuando no está describiendo una escena sexual, porque por más que las leía seguía sin gustarme esa forma caótica y acelerada de contar las cosas. Tiene una pluma sencilla, ágil y sin muchos aspavientos lingüísticos, lo que ayuda a que esas partes se hagan ligeras de leer, aunque le encontré con algunas escenas que bien podía haber eliminado y no hubiesen afectado al desarrollo de la trama. El final es tan predecible que creo que no es necesario que os lo cuente, ¿no? Termina como toda novela erótica, topicazo donde los haya y motivo por el que tiene la puntuación que tiene, porque pensaba suspenderlo desde un principio. Si, os estaréis sorprendiendo de que sea un tópico el que se lleve la parte buena de mi reseña, pero es lo único bonito que he encontrado en este libro, ahí tenéis el motivo.
"Los noventa días de Genevieve" pudo ser una novela revolucionaria en su tiempo, pero no en este siglo, donde estamos saturados de novelas del género. No aporta nada nuevo y sigue muchos tópicos. Lo único que se libra es el final, pero no es suficiente para que me gustara.
Y por los pelos.
¿Lo conocéis?¿lo habéis leído?¿qué os parece?Nos leemos ^^