Restaurante El Carro en Utiel, Valencia (España)

Restaurante El Carro en Utiel, Valencia (España)
Local de alta cocina situado en el número 21 de la Calle Héroes del Tollo, 46300 Utiel (Valencia) y en el que fui a comer junto a un amigo el Miércoles 13 de Mayo 2015.
La verdad es que me sorprende haber dejado pasar tanto tiempo, desde mi último paso por este restaurante, sobre todo teniendo en cuenta que se localiza en Utiel, y es el pueblo en el que vivo habitualmente. Tal vez esto sea debido a la fama de sitio caro que se ha forjado con el paso de los años, pero a día de hoy bien merece darle una nueva oportunidad, gracias a su muy elaborada cocina, servicio y atención, y por supuesto esas menciones de profesionalidad y distinción se pagan.
Pese a las apariencias desde fuera de un bar cutre, una vez dentro nos dejamos envolver por una luminosidad, amplitud, una decoración sencilla y elegante, todo junto a una improvisada exposición de diversas fotografías artísticas, basadas en el mundo de la tauromaquia.

Nada más entrar nos atendió en la misma puerta Jose Luis, su dueño quien junto a su mujer Maribel, regentan desde 1991 este emblemático lugar. Hay que decir que nuestra llegada fue bastante antes de las 14:00 Horas, sin duda un poco pronto ya que con diferencia, fuimos los primeros del día en llenar la sala, pero conforme se fue acercando la hora de comer, más comensales fueron poco a poco acudiendo.
 
Otra cosa que me llamó la atención fue el diseño de sus cartas, tanto la de vinos, con detalladas notas informativas, para una muy amplia oferta de caldos de la D.O. Utiel- Requena, como la de platos, ambas resultaron diseñadas con elegancia y con informaciones de todo tipo, muy valorable y a tener en cuenta, ya que por ejemplo en la de los platos, se podía rápidamente reconocer el contenido de los alérgenos en las diversas propuestas, para de este modo evitar cualquier sorpresa o intolerancia.

El primer entrante que nos fue servido, Sardinas Ahumadas con Tartar de Tomate y Encurtidos, bocado fino y elegante, en su punto de sal y sin raspas, muy gustosas, frescas y como todo hay que decirlo, este plato nos gustó tanto que le pedimos que nos fuese servido una segunda vez.

A continuación unas increíbles y alucinantes Alcachofas caramelizadas acompañadas de ensalada y Cecina de León, este plato semi-frío, estaba fuera de carta y nos fue  sugerido de forma muy acertada por Jose, ya que su entrada en boca se convirtió en una sensación más que agradable, combinando una suave dulzura, con el sabor propio de la alcachofa y todo ello conjugado con un toque ahumado, salado y ligeramente grasiento de la cecina. Un plato muy rico que debe ser tenido seriamente en cuenta, ya que no es muy corriente encontrarlo y que sólo por este plato, ya merece la pena venir a este restaurante.

Como cada vez me resulta de más en más aburrido pedir en restaurantes los típicos entrecôtes y solomillos, y con el espíritu una vez más, de querer descubrir cosas nuevas, el plato principal de la carta que me conquistó,  fue un Muslo deshuesado de Pollo de Corral, relleno de Setas y Foie. Por decir toda La verdad, su presentación fue demasiado sencilla y discreta, tal ve exageradamente minimalista para únicamente decorar el plato con un Cucurucho aceitoso relleno de queso fresco. De corazón sugiero que desde cocina , actualicen un poco la imagen de este plato ya que no le vendría nada darle un toque de elegancia y distinción, un poco más acorde a todo lo que se sirve habitualmente aquí. El pollo en sí mismo estaba muy bueno, hay que valorar y describir que sobre la calidad del plato no se tiene nada que objetar, su interior resultó cremoso y jugoso además de ofrecer un sabor muy intenso y definido... pero por poner un pero, su presencia en el plato me resultó demasiada solitaria, sosa y algo pobre.

De toda su extensa carta, el vino que fue elegido para maridar esta atractiva comida, fue Pasión de Bobal 2014 de Bodegas Sierra Norte, un moderno vino rosado monovarietal de uva Bobal, de color muy pálido no superior a 0,2 I.C. Color similar a aquellos vinos rosados tan consumidos en"la Pronvence Francesa". Vino fresco y ligero, con buenas notas de frutillos en nariz, con paso de boca corto y postgusto frutal notable. Un vino que ofrece una muy buena relación calidad / precio.


 
Para ponerle  la guinda a tal momento, el postre fue una muy grata sorpresa, delicioso Mousse de Cava con elementos crujientes en su parte superior, acompañado de una bola de helado de Bobal, y para acompañar el café, una trufa de chocolate negro junto a una original lámina de caramelo elaborada a su vez con almendras.



Dese mi punto de vista y transmitiendo en estas lineas lo que a lo mejor se pueda oír en el pueblo por parte de amigos, familiares o personas varias, generalmente la gente siempre suele opinar desde un punto de vista demasiado subjetivo, se deja llevar por lo que le hubiese gustado ver o sentir y descuida demasiadas veces, toda la investigación y toda la formación que un cocinero debe llevar a cabo, para finalmente crear estos platos tan elaborados y a la vez deliciosos. 
Bien es sabido que nadie es profeta en su tierra, y sobretodo que no todo el mundo es capaz de apreciar los valores que se puedan transmitir desde una gran cocina, y no es difícil creer que este restaurante tiene muchos incondicionales que recorren grandes distancias para saborear sus platos o aprovecha su paso por Utiel para hacer un alto en su viaje... y es una pena que la gente de la comarca, no sepa valorarlo.
Reconozco, como opinión personal, que desde la última vez que vine a comer "al Carro", y de eso ya han pasado varios años, este lugar a progresado mucho, aunque en mi opinión todavía tiene un amplio margen de mejora en ciertos detalles, ya que como simple y única nota negativa, la cual quisiera que fuese tenida en cuenta como sugerencia constructiva, la sencillez o austeridad con la que se acompañan los platos, deba ser atentamente revisada, para que los clientes que no hayan sabido valorar lo que han comido, al menos vuelvan a casa diciendo que "En el Carro han mejorado, ya hay más comida que antes en lo platos"



Por todo lo citado y comparando "El Carro" con otros lugares de buen yantar, cuales ofrecen una cocina creativa de rasgos similares, citar que esta vez estamos frente a un restaurante que no defraudará nunca a todo aquel que busque encontrar o ser sorprendido por su originalidad, su mucha elaboración, digna elegancia, buen servicio, y un trato profesional... todo ello lo encontrará a un precio que para nada desmerecerá lo servido y que para nada resultará caro, si bien se sabe interpretar.