Restaurantes: El Jardí de Can Marc

¡YA ESTOY DE VUELTA!

Tras aterrizar de mis cortas pero intensas vacaciones, me he puesto a ordenar mis ideas y mis temas pendientes de plasmar en el blog, que no son pocos, a pesar de que con la cocina patas arriba es difícil generar nuevos contenidos.

Me gustaría empezar este resumen estival con la que considero una gran experiencia, tanto culinaria como personal. Hoy os hablaré de un lugar encantador: El Jardí de Can Marc.


La masía cuenta con más de dos siglos de historia. Por ella han pasado cuatro generaciones que han evolucionado en el tiempo sin olvidar sus raíces y manteniéndose siempre fiel a aquello que la hizo única: saber conservar una de las vistas más privilegiadas de la Costa Brava donde gozar de la contemplación del paso de las horas. 
Un jardín donde vivir grandes momentos de descanso en un ambiente silencioso, donde poder conversar apaciblemente, donde poder pasear con una copa mientras contemplas las hermosas vistas, sin duda, un lugar donde volverse a enamorar.
Desde nuestra llegada, los propietarios deEl Jardí de Can Marc nos hicieron sentir como en casa, nos ofrecieron una mesa con unas espectaculares vistas al Castillo de Begur.
La velada empezó con una cerveza para Víctor y un delicioso zumo de sandía y fresas para mí.  Quizás fue un sacrilegio no probar uno de sus vinos, pero ahora he de ser buena y cuidar al bebé, además el zumo me pareció delicioso!!!

A continuación, nos empezaron a deleitar con una extensa selección de tapas de autor, a cual más apetecible.
Sorprendentes bravas elaboradas a partir de un puré de patata hecho bolitas y frito para dar el toque crujiente al plato. ¡Un estallido de sabor!Las croquetas, espectaculares, y el Fish&Chips de la casa, ummmm!
No faltaron las olivas Gordal rellenas de boquerones y de queso azul.

Para continuar con una butifarra dulce, para los amantes de las combinaciones atrevidas, y un secreto ibérico con crujiente de pipas.

De postre, unos vasitos dulces de crema y panacota.

Sin duda, El Jardí de CanMarc es un lugar ideal para tomar una copa tranquila acompañada de unas tapas, mientras contemplas las vistas del antiguo castillo y te dejas llevar por la emoción del momento.Precio medio de las tapas: 4,50 - 6 €