Mucho estábamos tardando en conocer la noticia de que el bestseller “Sapiens: De animales a dioses” será una película. Un libro aclamado por el público y la crítica, ventas millonarias y una historia con potencial para toda una saga de películas es un caramelo que ningún estudio de cine podría dejar pasar por alto.
No podemos olvidar que tanto Riddley Scott como Asif Kapadia son profesionales muy reconocidos dentro de la industria y sólo con añadir su nombre al proyecto ya generan suficiente revuelo en las redes sociales y en los medios de comunicación como para comenzar a rentabilizarlo antes de su estreno en cines. Y es que, hoy en día los ingresos de publicidad antes del estreno son casi tan importantes como la recaudación en taquilla, haciendo que muchas películas sean un éxito antes de que el público las vea.
Un buen ejemplo son las últimas películas de Superman o 007, que consiguieron tantos contratos de merchandising, licencias y product placement que el estudio de grabación recuperó la inversión desembolsada antes del estreno. ¿Acaso pensabas que cuando Los Vengadores se pelean dentro de una Apple Store es casualidad? Marvel y Disney ingresaron decenas de millones de dólares sólo por esa escena.
A nivel editorial las librerías tienen que estar frotándose las manos porque las ventas del libro se van a disparar de aquí hasta el estreno de la película.