Hoy estuve tentado de borrar de la recopilación una jugada en la que el |10| erra un pase. No porque estuviese imposibilitado de aceptar que un jugador brillante pudiera equivocarse, sino porque la intención de la jugada era perfecta, el pase bien dirigido, y la única falla fue la potencia, no merecía coso ser juzgado por un detalle tan leve.
Al final no la borré, y recordé que alguien, hace muchos años, tenía previsto que la censura, herramienta del hombre, evolucionaría a la par de la involución de su creador. Y parece cumplirse la profecía.
La censura es un ente, ha evolucionado en tal grado que ahora crece como el pasto. Se activa encausando al común hacia el redil que anula cualquier posibilidad de defensa, el del Odio. Han creado un Golem de miles de cabezas al que solamente necesitan dirigir, teledirigir, radiodirigir.
Vivimos hoy censurándonos sin querer entre nosotros, censurado contra censurado, entre pares. Se ve que involucionamos.
Boca ganó por un gol el domingo, y coso no tuvo su mejor tarde.
Pasenlá joya.