Revista Cultura y Ocio
Roma. Finale (incluye consejos para viajeros)
Por Alejandra Naughton Alejandra Naughton @alenaughtonNos alejamos de Roma, ya estamos camino a Florencia...¿cómo pasaron los días tan rápido? Antes de que la bella Toscana se nos venga encima, termino con algunos temas salpicados que querría queden en mi memoria:
* El Panteón...qué extraña fascinación ejerce. Joya de la arquitectura, construido en honor a las divinidades de la Julio Cesar (sobre un templo anterior construido por Agripa) fue el primer templo pagano convertido al cristianismo y, en consecuencia, el mejor conservado. Se conforma de dos espacios bien diferenciados: el pórtico rectangular de acceso en la que se destacan las columnas y el cuerpo central, enorme cúpula (de 43 metros de diámetro) madre de todas las cúpulas. Con categórica coincidencia su alto coincide con su ancho, permitiendo imaginar una esfera perfecta. La sensación de espacio y elevación que crea es clara, así como el ambiente todo, que se ilumina desde el óculo central con diferentes matices conforme gira el sol. Su plaza...su plaza es una fiesta...que gira alrededor de su obelisco.
* El Coliseo es otra joya que no deja de sorprender. Toda su estructura, funcionalidad, circulación es exactamente la que observamos en los estadios deportivos modernos. Como si nada hubiera cambiado, como si los romanos con su impronta lo hubieran hecho todo, sin dejarnos espacio para la evolución. Nosotros hicimos la visita nocturna, resulta mucho más misteriosa por la ausencia de bullicio (sólo entran a esa hora pocos grupos guiados), por la oscuridad y porque permite acceder (a diferencia de las visitas diurnas) al nivel de la arena y los subsuelos donde se pueden apreciar las complejas estructuras que utilizaban para albergar a los gladiadores, y animales de enorme porte, elevarlos y bajarlos a nivel de la arena y hacer circular agua para mantener el ambiente en razonable estado de higiene.
* Capilla Sistina: Sí, si, sí. Ella, y no los Museos Vaticanos es quien nos cautivó en la última noche. Mucho se puede hablar de ella, desde que debe su nombre al Papa Sixto IV hasta que su forma es definida pero imperceptible desde San Pedro, hasta que es el lugar en el que se celebran los cónclaves cada vez que se elige un Papa. Sin embargo voy a decir solo que se relata en el libro de Irving Shone, "La Agonía y el Extasis" que cuando Leonardo Da Vinci vió los frescos en la bóveda pintada por Miguel Ángel, y en particular el cuidadoso estudio de anatomía que había en semejante obra, le dijo: "Si tu uso de la anatomía hace a la Capilla Sistina tan buena, quienes te sucedan deberán usar mas anatomía para ser mejores (...). Llevaste el uso de la anatomía a tal perfección que no hay margen para otros, por lo que quienes te sucedan distorsionarán cuerpos y entonces se dirá: "La culpa es de Miguel Ángel, sin él podríamos haber refinado y mejorado la pintura anatómica durante siglos". Pues bien, tu la comenzaste y la terminaste en sólo un techo". Luego de tantos años de rivalidad y de íntima competencia imagino a Miguel Ángel reconfortado por tan sarcástico elogio.
Para terminar, unos consejos prácticos para visitar Roma:
* La zona de Piazza Spagna es ideal para estar mas o menos a la misma distancia del Vaticano y del Coliseo de manera que, con buen calzado, las recorridas se pueden hacer caminando y, de paso, disfrutando de las callecitas detenidas en el tiempo. Nosotros estuvimos en la zona del Palazzo Borghesse (Hotel Fontanella Borghese), a pocas cuadras de las escalinatas de la Piazza pero a la vez muy tranquilo sin tanto bullicio.
* En verano, las visitas nocturnas proveen una fantástica oportunidad de evitar colas eternas, tumultos y calor insoportable. De noche pudimos hacer: Coliseo, y Museos Vaticanos. También se pueden hacer los Foros Romanos con espectáculo multimedia y todo (nosotros no llegamos). Como San Pedro está cerrada de noche, les aconsejo ir bien temprano porque las colas durante el día son muy descorazonantes!
* Para las compras (y si...Roma también es sinónimo de moda y estilo) las calles obligadas son: Vía del Corso, Vía Condotti, Vía Frattina. (la Galería Alberto Sordi puede esperar).
* Ah...una última: si van por la Fontana de Trevi, esperen un poco, está en plena restauración!
Ahora sí: allá vamos, Florencia!