Revista Cocina
Ciertamente llevo un tiempo que me he dedicado bastante a la repostería creativa, me gusta y los cursos me van bien. Pronto pondré lo que hicimos ayer en el curso de cupcakes, pero mientras tanto para nada olvido la repostería nuetra de toda la vida, esas recetas que se elaboran muy frecuentemente y que siempre quedan deliciosa.s recetas que nos traen hermosos recuerdos. Una receta joya de la repostería popular española, pero que no se puede decorar como las galletas o los cupcakes, pero sin duda decoran el paladar de todos nosotros. Le he hecho unas modificaciones a la que yo tenía y creo que quedan todavía más ricas.
Os recuerdo el curso de galletas de Navidad del próximo sábado en Zaragoza (España), lo aclaro porque me ha escrito gente desde México. Si os apetece apuntaros escribid a [email protected] cuanto antes. Me queda alguna plaza
ROSQUILLAS FRITAS DE MOSCATEL Y NARANJA
Ingredientes para un buen montón de rosquillas
4 huevos (200 gr.)250 gr. de azúcar1 dl. de zumo de naranja1 dl. de moscatel corteza de naranja finamente rallada1 dl. de aceite de oliva suave (Para la masa) 750 gr. de harina 20 gr. de levadura química Royal o de la marca que se quieraabundante aceite de girasol o de oliva suave para freír las rosquillasazúcar granillo para salpicar las rosquillas al final
Preparación: Montar los huevos con el azúcar de forma que queden espumosos y cremosos. Añadir el zumo de naranja, la ralladura, el aceite y el moscatel. Después agregar la harina mezclada con el impulsor o la levadura química. Una vez que la harina se ha incorporado toda (quedará un poquito pegajosa la masa). Poner en un bol, tapar con film y dejar reposar la masa en la nevera de un dia para otro. Quedan así muy ricas. Formar rosquillas y freír en abundante aceite caliente. Dejar entibiar un poco y todavía calientes rebozar en azúcar granillo. Luego dejar enfriar completamente antes de consumir. Es mejor dejarlas para el día siguiente, si es que se puede o te dejan. Con esta cantidad salen un buen montón de rosquillas, pero duran unos cuantos días. De todas formas se pueden dividir las proporciones, pero ya que nos ponemos y que las tardes van siendo más fresquitas y largas, se puede uno dar el capricho de poder obsequiar a la familia y amigos con unas ricas rosquillas.
La masa debe quedar un poco pegajosa y es mejor así, para que quede más ligera y esponjosa. Si está muy metida en harina, las rosquillas salen bastas y se ponen duras muy rápidamente. Si cuesta un poquito manejar la masa para formar las rosquillas, se enpolvan las manos con un poco de harina y así se forman muy bien.