De nuevo volvemos con un receta inspirada en el universo del gran chef Gordon Ramsey, ¿por qué?, porque nos gusta y porque nos divierte...
Fuera de bromas Ronaldas, repetimos, porque su estilo casa muy bien con nuestro paladar y porque aprendemos muchas cosas por el camino.
Y aprendemos porque no todo sale bien y de eso va el post de hoy, de un "medio acierto" y de algún "error" cometido y la explicación para que no lo cometáis vosotros.
En este caso se trata de una receta de salmón que se cocina en una especie de sopa de miso acompañado de hierbas aromáticas, verduras, etc...
Y aquí viene el error cometido y la solución. Resulta que hay muchos tipos de miso y yo utilicé Hatcho miso, un miso elaborado sólo con habas de soja y muy fuerte de sabor, quizá demasiado para este plato, por lo que creo que sería mucho más adecuado utilizar Shiro Miso o miso blanco, que es mucho más suave. En cualquier caso no se trata de un error "absoluto", el plato salió bien, tenía buen sabor, aunque el caldo mató un poco al salmón, aunque resultó una sopa realmente potente.
Así que ya sabéis, utilizad Shiro miso y saldrá más suave y de un color mucho más claro y si queréis saber más acerca del miso, os recomiendo este post: http://www.umami-madrid.com/2010/06/11/usos-aplicaciones-y-tipos-de-miso/
Ingredientes:
- Un lomo de salmón (unos 500 gr).
- Un cucharada sopera de Shiro Miso
- Agua o un caldo suave de verduras
- Jengibre
- 200 gr. de Brécol
- 1/2 bulbo de hinojo
- 1 chile rojo grande.
- Eneldo fresco.
- Setas Enoki (o cualquier otra que os guste y que no tenga mucho sabor, yo no encontré y utilicé champiñones).
Elaboración:
1.- Lo primero es elaborar un caldo o sopa de miso con el agua o caldo de verduras a fuego lento, a la que incorporamos el miso y cuando se disuelva añadimos el hinojo, el chile y el jengibre picados.
2.- Cuando los aromas comiencen a infusionarse, incorporamos el lomo de salmón entero, ¡con la piel hacia abajo!. El caldo debe cubrir la pieza de salmón. Dejaremos que se cociene a fuego lento de cinco a siete minutos. Retiramos.
3.- Incorporamos al caldo el brécol cortado y dejamos cocer unos 10 minutos o hasta que alcance la textura deseada.
4.- Mientras retiramos la piel del lomo de salmón (saldrá muy fácilmente sólo con tirar con los dedos) y sacamos lascas del lomo.
5.- Montamos el plato haciendo pisos con las lascas del salmón y las setas enoki u otra que no necesite cocción para su consumo (unos champiñones, por ejemplo, que es lo que utilicé yo). Incorporamos el caldo caliente con los trozos de brécol, más pisos y finalmente más caldo. Decoramos con eneldo picado.