Se ha perdido la fe en el sistema

El dólar es un sistema

El dólar más que una sola divisa, es todo un sistema que ofrecía y garantizaba un desarrollo económico, por eso, como establecí en otros artículos,  teóricamente, si el petróleo aumentaba su valor, el dólar perdía fuerza con respecto a otras monedas y a la inversa, aunque esto no debe entenderse como un principio o axioma del sistema económico, sino, más bien como la relación entre los dos fundamentos del sistema económico , esto es, la unidad de pago y el recurso de consumo, según su escasez o abundancia. Una relación que funcionaría de la misma manera si el oro fuera la unidad de pago y la madera  el recurso de consumo, ambos, fundamentales, como bien podría ser en una economía medieval.

Explicando más a fondo, el principio de esta relación es también un principio económico, por eso ni el dólar, ni el oro, ni el petróleo son principios, sino únicamente los recursos, del sistema, en un momento histórico. El principio es muy sencillo,  en la medida que uno de los recursos, fundamentales, incrementa o decrementa su volumen con respecto al otro, tendría que incrementar o disminuir su valor; si hubiera exactamente un dólar por cada barril de petróleo, esto no podría valer más que un dólar, sin embargo, conforme incrementamos la masa monetaria y se mantiene o disminuye el número de barriles, entonces tendería a costar más, por simple operación matemática. El sistema parece más complejo, pero en realidad parte desde ese simple principio matemático, se dificulta conforme añadimos otras divisas y otros factores políticos que pueden hacer que no resulte exactamente igual, pero a final de cuentas, todas las divisas están en función del dólar, y este en función de la diferencia entre consumo y disponibilidad de petróleo en la economía americana y sus satélites

El oro no vale por lo que es sino por lo que puede comprar

Todos nos conocemos la historia de la conquista de américa, al menos en su versión más limitada, esto es, un grupo de conquistadores con sed de oro llegaron a América con la intención de llevarse la mayor cantidad de oro y plata, y hacerse ricos. Hasta allí nos quedamos la mayor parte de las personas, pero pocos nos ponemos a cogitar sobre si este evento fue no solamente benéfico para España sino incluso pernicioso, damos por asumido que todo ese oro y plata, fue solo beneficios. Sin embargo, la realidad es que, como consecuencia de el súbito incremento de la masa de oro y plata, España sufrió la primera gran crisis de inflación en la historia moderna haciendo que su industria fuera mucho menos competitiva, en términos de costo que la de sus rivales como Holanda, llevando a la bancarrota gran parte de su industria y hasta explicando, al menos en parte, el atraso industrial de España.

De igual forma, como sucedió hace 500 años, no esperemos  que los precios de los bienes se mantengan igual  si el volumen de uno de los dos recursos aumenta, se mantengan como si nada. Ahora bien, nuestro sistema económico, de génesis anglosajona , funciona más por las expectativas futuras que por los resultados presentes, aunque ciertamente, influyen.

La doctrina económica dolacéntrico pierde credibilidad

Como se ha establecido, el sistema económico actual funciona por expectativas futuras, sin embargo, al menos desde los últimos 30 años se parece mas a un esquema Ponzi  que constantemente tiene que actualizar sus predicciones debido a que rara vez las logra cumplir, ocasionando que la deuda neta no deje de incrementar haciendo que se fortalezca el bucle inflacionario y que los acreedores se empiecen a preguntar cuando recibirán su pago.

Como todo esquema Ponzi piramidal, el vértice superior es el dueño de la doctrina y necesita  que el mayor número de personas se adhieran al sistema para su expansión, analógicamente, los adherentes más recientes son aquellos países conocidos como subdesarrollados o en vías de desarrollo, así como las clases medias en los países desarrollados y están en los niveles inferiores de la pirámide.

Las pérdidas y la deuda se distribuye entre todos los miembros de la pirámide, una situación que le pega de forma más acuciosa a las clases medias y a los países en desarrollo, llevando a que se origen movimientos políticos poco ortodoxos que busquen una revisión o una salida del sistema.

El petróleo pierde correlación con el sistema del dólar

Petróleo crudo

A pesar de que EEUU y los países de su ecosistema se encuentran en un ciclo, claramente, de des aceleración hacia la contracción,  los precios del petróleo se mantienen en rango, algo que no sucedería cuando hay una fuerte correlación y se confía en el dólar, y cuando las medidas monetarias son contundentes y claras de forma que las proyecciones a futuro hacen sentido. A esto anterior se le debe unir el hecho de que el oro se ha mantenido al alza que como activo de refugio por excelencia nos da mucha información sobre este estado de salud  y que va en sintonía con las tendencias geopolíticas dedolarizantes así como los recientes trabajo de Zoltan Pozar.

Precio del oro

Aunque la economía China es cada vez un mayor factor de asociación con el petróleo, la economía de la OTAN en conjunto sigue siendo más del doble que la China por lo que en teoría debería tener todavía mayor influencia y no se está observando