Las condiciones que determinan la presencia del fenómeno La Niña aún se han mantenido. Los índices del ENSO ( El Niño-Oscilación del Sur) permanecieron negativos a través del mes de noviembre con la excepción de la región de El Niño1+2 donde la temperatura superficial del mar se mantuvo cerca del promedio en el extremo Este del Océano Pacifico a finales del mes. Adicionalmente, el contenido calórico en los niveles superiores del océano permanecieron por debajo del promedio asociado a temperaturas más frías en las aguas profundas, aunque este enfriamiento disminuyó un poco durante el mes. Todo ésto, aunado a la falta de desarrollo vertical de nubes relevantes en la zona de El Pacífico en cuestión e intensificación hacia Indonesia, más los regímenes de vientos concluyen que el sistema combinado de océano y atmósfera durante el mes de noviembre reflejó una continuación de condiciones de La Niña débil.
Por otro lado como observamos en la imagen anterior, mientras las aguas superficiales del Pacífico ecuatorial central y oriental dan muestras de anomalías negativas (aguas más frías de lo normal) el lado Atlántico incluyendo El Caribe sigue indicando anomalías positivas lo que favorece probabilidades de lluvias por encima de la media para esa zona. De acuerdo a los modelos proporcionados por el International Research Institute for Climate and Society y los análisis actuales, se prevé que el fenómeno La Niña permanezca hasta febrero de 2017 aproximadamente, para luego entrar en una fase neutral (sin El Niño ni La Niña).
Así mismo, el modelo a mediano plazo ECMWF sugiere hasta un 80% de probabilidades de lluvias sobre la media para el Norte de Suramérica (Norte de Brasil, buena parte de Venezuela, Las Guayanas, Colombia y zonas del Caribe) y áreas de Centroamérica para éste trimestre dicembre-enero-febrero, precisamente mientra se mantenga la variable climática La Niña.