Senderismo
en La Galga.
En el día de ayer, hice una excursión a uno de los mejores lugares donde se conserva la laurisilva canaria. Este espléndido lugar es el Cubo de La Galga.
La Galga es un barrio del municipio de Puntallana, La Palma (Islas Canarias, España). El barrio limita por el norte con el barranco de La Galga y por el sur con el barranco de los Nogales, que los separa del barrio de Los Gagitos, situado en el municipio de San Andrés y Los Sauces, y con El Granel respectivamente. Estos cursos de agua, junto a otros, dividen el pueblo en numerosos lomos. Las condiciones climáticas de la isla de La Palma, conocida como la isla bonita debido a su color verde, hace muy favorable la práctica de la agricultura en los campos de los frutales y hortalizas.
Además, un dato curioso y que acabo de leer, es que este pequeño barrio tiene una personalidad propia respecto a su municipio, y es por ello, por lo que los habitantes de este quieren ser independientes de su actual ayuntamiento.
Muestra de la frondosidad del Cubo.
Después de habernos situado y de aprender un poco sobre la geografía del municipio, vamos a hablar de la impresionante maravilla natural que representa el Cubo de la Galga.
Tal es la humedad que hay setas en pleno julio.
Adentrado en el barranco del mismo nombre, este bosque que es capaz de impresionar a cualquiera, cuenta con numerosas especies vegetales. Entre todas estas, caben destacar el viñátigo, el fayal, el brezal... Y si os acordais, todas estas especies estaban presentes en el bosque de Agua García, entrada publicada antiguamente. Ambos, de una riqueza vegetal extraordinaria, cuyos altos árboles no dejan pasar los rayos del sol, creando un paisaje casi encantado. En el Cubo de la Galga, a medida que nos adentramos en él, podemos oir el cantar de los pájaros y del discurrir del agua, casi imposibles de ver ambos. Respecto a los primeros, tuvimos la suerte de ver un pequeño espécimen, de cuyo nombre no me acuerdo; y que lamentablemente no tuvimos ocasión de fotografiar. El segundo, el discurrir del agua, si se puede ver, pero sólo en época de lluvias, cuando toda ese agua discurre bosque abajo atravesando un salto de agua que en la zona se llama "caboco". Además, una vez que seguimos andando, encontramos una curiosa construcción de piedra, una especie de túnel, que cubierto por el musgo, provoca todavía mayor sensación de estar en otro mundo. Más tarde, llegamos a un pequeño llano donde se puede hacer una parada para comer. Posteriormente, y si no quieres llegar al punto de información, damos media vuelta y si nos apetece continuar el sendero, podemos tomar el que conduce al mirador de Somada Alta, donde podemos apreciar todo el paisaje que nos ofrece el pueblo de la Galga.
Mirando a través del túnel de piedra.
En resumen, para todo buen amante del senderismo y de la naturaleza, en mi opinión este bosque es una de esas citas imprescindibles, debido a su color verde y a la calma que se respira dentro de él, además de que es uno de los pocos rincones con laurisilva en estado puro que actualmente nos ofrece la naturaleza canaria. Un detalle para terminar. Si las señas que he dado sobre la localización y senderos del Cubo les parecen pocas, les recomiendo que los busquen en páginas expresamente dedicadas a ese deporte tan bonito que es el senderismo.