Como un paso más del nuevo enfoque que quiero darle a mi blog en blogger, después de decidir volver, empecé por un artículo de Valencia y seguí con uno de actualidad, aunque invitando a una reflexión sincera sobre las actitudes que tomamos ante la justicia.
Sin embargo dado el carácter político y de defensa de las libertades de dicho artículo he decidido, también, traéroslo aquí:
“...el acusado causó con su resolución una drástica e injustificada reducción del derecho de defensa y demás derechos afectados anejos al mismo, o con otras palabras, como se dijo ya por el instructor, una laminación de esos derechos, situando la concreta actuación jurisdiccional que protagonizó, y si se admitiera siquiera como discutible, colocando a todo el proceso penal español, teóricamente dotado de las garantías constitucionales y legales propias de un Estado de Derecho contemporáneo, al nivel de sistemas políticos y procesales característicos de tiempos ya superados desde la consagración y aceptación generalizada del proceso penal liberal moderno, admitiendo prácticas que en los tiempos actuales solo se encuentran en los regímenes totalitarios en los que todo se considera válido para obtener la información que interesa, o se supone que interesa, al Estado, prescindiendo de las mínimas garantías efectivas para los ciudadanos y convirtiendo de esta forma las previsiones constitucionales y legales sobre el particular en meras proclamaciones vacías de contenido.“
Sentencia del juicio al acusado D. Baltasar Garzón Real, por las escuchas a abogados y acusados de la trama Gurtel.
Si en lugar de espiar a los acusados de la trama Gurtel hubieran sido a los del caso campeón o si en lugar de implicar a políticos del PP se implicara a políticos del PSOE o de partidos nacionalistas, como en el caso campeón, la sentencia sería igualmente clara y valida. Y yo estaría igual de acuerdo con ella pero todos los que se oponen a ella ¿seguirían oponiéndose?