Revista Psicología

¡¡¡Shhhhhhhhhhh!!!…. ¿Escuchas?

Por Bvillar1970
¡¡¡Shhhhhhhhhhh!!!…. ¿Escuchas?

Por Bernardo Villar

Estás hablando con alguien, de cualquier cosa. La charla está interesante, todo muy bien.

Ahora, para. ¿Qué has oído?

Puedes haber oído la anécdota, la historia que te ha contado tu amigo. La historia literal. Está muy bien

Puedes también haber oído lo que tu te estás contando sobre la historia que tu amigo te cuenta. Esa tiene más que ver contigo que con tu amigo. Estás escuchando lo que estás programado a escuchar filtrando todo por tus juicios, principios, valores, creencias, etc. No estás escuchando tú sino la conversación que te está utilizando y de la cual no eres consciente. el "ya siembre", el "Uno", el "already always".

Esta es una distinción interesante si te pones a verlo. El mensaje que recibes siempre va a ser distinto al que la persona con la que hablas quiere transmitirte. Siempre existe una brecha entre lo que me dicen y lo que escucho, o entre lo que yo digo y la gente escucha. Es inevitable.

Pero si es inevitable que yo malinterprete y sea malinterpretado, estar consciente de ello abre la posibilidad de acortar esta brecha entre lo dicho y lo entendido.

Y esto es importante a la hora de hablar de la tercera posibilidad al escuchar: escuchar lo que no me están diciendo.

Al final, lo que no me están diciendo suele ser más importante que todo lo que la gente me dice. Ahí reside el secreto de poder entender realmente de dónde viene la gente que habla contigo y te permite poder, en su caso, estar en la posibilidad de prestar apoyo si es necesario.

Escuchar lo que no me dicen de un modo eficiente requiere estar consciente de que hay conversaciones que me están usando todo el tiempo y que por lo tanto, lo que entiendo de lo que se me dice y lo que no se me dice, siempre va a tener que ver conmigo, y sin perderlo de vista podré ampliar mi comprensión de la gente de mi vida y ampliar la efectividad de mi manera de relacionarme con las personas al estar siempre consciente de que cualquier juicio que salte a mi mente tiene que ver conmigo y mi marco de referencia, no con la otra persona y lo que me comunica.

Así que...

¿Qué acabo de decir? ¿Qué percibes que no estoy diciendo? ¿Qué conversación te está haciendo interpretarlo como sea que lo estás interpretando?


Volver a la Portada de Logo Paperblog