Siri, la asistente que poseen todos los dispositivos de Apple, según la empresa está diseñada para resolver todo clase de problemas. Y uno muy curioso es la utilización que le dio una niña pequeña para ayudar a su madre.
Liz Neaton, ciudadana estadounidense y que actualmente vive en Minnesota, sufre un desorden nervioso, cuyos efectos son pérdidas temporales del conocimiento. Un ejemplo donde puede ocurrir esta situación, es cuando Liz se levanta muy rápido. Por esta causa, Neaton enseñó a su hija, de corta edad, a usar Siri para marcar el 911, el número de emergencias.
Llegado el día, la pequeña cogió el dispositivo de Apple, seguramente un iPhone, y habló con Siri, ordenándole que marcara el 911. De este modo, la pequeña fue capaz de salvar la vida a su madre y de salvarse a si misma de quedar huérfana. Digamos que esta es una publicidad caída del cielo para la empresa de la manzana mordida.