Sitges 2011: El thriller se escribe con tinta roja y espesa

En coreano, thriller se debería escribir con tinta roja y espesa. Sobretodo en el caso de la excelente ópera prima de Na Hong-jin, nombre que los aficionados ya deberían colocar entre los de Bong Joon-ho y Park Chan-wook. No es para menos. "The Chaser" se erigía, allá por el 2008, en la “Infernal Affairs” de la temporada, narrando con furia inusitada la brutal persecución que se iniciaba entre un ex-policía devenido proxeneta y un enloquecido psicópata. Una carrera contrarreloj, cuajada de obstáculos, que ponía los pelos de punta. Así de fácil, un asesino en serie, un proxeneta (supuestamente) serio y un puñado de chicas de buen vivir y mal morir eran los protagonistas de un thriller que se devoraba, digería y olvidaba con la compulsión de un sushi de 10€. Tras su exitoso pase por el Festival de Sitges, "The Chaser" nos regalaba un nombre más a tener en cuenta en el prestigioso podío criminal del cine coreano. Este año llega a Sitges, tras su exitoso paso por la Sección Un Certain Regard de Cannes, su segunda película, una nueva (y extrema) persecución que da pie a "The Yellow Sea".

¿De qué va?

Frontera entre Rusia, China y Corea del Norte. Acosado por las deudas, cerca de la miseria, un hombre acepta un contrato para asesinar a alguien. Es su último recurso para cubrir las necesidades de su familia. Conoce pocas cosas sobre su objetivo. Pero no habría imaginado nunca el engranaje por el que sería devorado.

La prensa ha dicho

" The Yellow Sea" es un emocionante, a veces duro de ver, drama criminal en el que las gráficas peleas de cuchillo y los enfrentamientos a hachazo limpio campan a sus anchas. La acción esta llena de trepidante tensión, pero ellos son, los personajes, los principales responsables de dar vida a una historia llena de misteriosos recovecos por resolver. En definitiva, acción y violencia al servicio dle mejor thriller y un claro exponente del gran cine que hoy día se rueda en Corea.