Arranca una nueva edición del Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya celebrado cada año en la ciudad de Sitges. Edición que presenta sobre todo algún que otro cambio logístico relevante. El festival añade una nueva sala de proyección, la sala Tramuntana, cuyo objetivo es aumentar los pases de la gran cantidad de películas programadas. Una sala muy bienvenida por los acreditados de prensa, ya que la mayoría de proyecciones de esta sala son abiertas a periodistas. Ángel Sala, director del festival, prometió el año pasado reducir considerablemente el número de películas en sección oficial, promesa que ha esquivado con la creación de una nueva sala que realmente no acaba de facilitar a los acreditados el visionado de los 36 largometrajes que compiten en la máxima categoría del certamen. Categoría, eso sí, llena de grandes y esperadas películas.
Takashi Miike, el director japonés más prolífico e interesante de la actualidad, es el invitado estrella de este año junto a Oliver Stone (que recibe un premio honorífico). Miike presenta dos películas, ambas en sección oficial, As the gods will, narración de terror psicodélico a partir de la tradición de juguetes infantiles nipona y Yakuza Apocalypse, en la que vuelve a su género predilecto yakuza pero introduciendo la figura del vampiro.
As the gods will de Takashi Miike
Apichatpong Weerasethakul, director tailandés que se ha convertido en una referencia mundial del cine contemporáneo, también participa en sección oficial con Cemetery of Splendour, film que ya ha cosechado grandes críticas en el pasado festival de Cannes.
Dos clásicos del festival, Eli Roth y Kiyoshi Kurosawa, vuelven este año a sección oficial con Knock Knock y Journey to the shore respectivamente. El primero apuesta por hacer sufrir a un padre de familia interpretado por Keanu Reeves y el segundo por introducir de nuevo la fantasmagoría en su relato.
Otras grandes destacadas de la sección oficial son: el nuevo film de Arnold Schwarzenegger Maggie; la última adaptación de Shakespeare a la gran pantalla de Macbeth con Cotillard y Fassbender; o Green room, el film punk rock violento con participación de Patrick Stewart, entre muchas otras.
Las películas de sección oficial vuelven a estar acompañadas por unos 250 largometrajes más de las otras categorías del festival. Estudiarlas con detenimiento resulta tarea imposible pero sí que merece la pena destacar varias películas muy esperadas en el festival.
La bruja, esperado film de terror canadiense inaugura el festival el viernes 9 y Into the forest, relato apocalíptico protagonizado por Ellen Page y Evan Rachel Wood, lo clausura. Entre las películas de animación que se presentan este año destacan Anomalisa, el esperado nuevo film del guionista/director Charlie Kaufman y la nueva joya de animación nipona The boy and the beast. La adaptación del manga/anime Ataque a los titanes; Love 3D el nuevo film “pornográfico” del polémico Gaspar Noe; Youth de Paolo Sorrentino; The assassin, lo nuevo de Hou Hisao-Hsien; Hitchcock Truffaut, documental que tuvo gran éxito en el pasado festival de San Sebastián; o Ryuzo and his seven Henchmen, lo nuevo de Takeshi Kitano… son algunas de las promesas del festival.
Quedan muchas otras grandes películas por nombrar sin contar todas las sorpresas que nos depara este año el Sitges Film Festival. Certamen que año tras año aumenta considerablemente el número de actividades paralelas: la emisión de series televisivas, pitchings, masterclasses, exposiciones… Actividades que junto a la inmensa (y a veces agobiante) programación hacen de nuevo de Sitges Film Festival no solamente el mejor festival de cine fantástico, sino probablemente uno de los mejores a nivel nacional e internacional en cuanto ambiente y público.