Si algo me maravilla de los platos de cuchara italianos es su sencillez, como con pocos ingredientes y preparaciones básicas consiguen platos tan sabrosos y reconfortantes, platos que no solo nos llenan el estómago, sino todos los sentidos y nos transportan a esa sensación de hogar y confort que no se consigue con cualquier receta.
INGREDIENTES
2 zanahorias.
2 ramas de apio.
1 cebolla.
200 gr. de garbanzos cocidos.
600 ml. de caldo.
Un buen puñado de pasta corta al gusto.
Sal y pimienta.
Perejil y parmesano en polvo.
- Pelamos y picamos bien la cebolla, la zanahoria y el apio. Ponemos una cazuela al fuego con un poco de aceite y doramos las verduras unos 10 minutos.
- Añadimos los garbanzos, el caldo y cocinamos unos 5 minutos más. Con ayuda de un cucharón hondo, sacamos la mitad y lo trituramos bien con la batidora. Lo volvemos a la cazuela. Salpimentamos al gusto y mezclamos bien.
- Añadimos la pasta y removemos a menudo hasta que esté al dente. Servimos con un poco de perejil picado y parmesano en polvo.
No me digáis que no es sencillo, lo preparamos todo en la misma olla, como los guisos de toda la vida, y y al usar garbanzos ya cocidos, el tiempo de preparación es realmente poco, vamos que en unos 20 minutos tenemos un plato de cuchara que os aseguro que es super rico y sabroso.
En cuanto a la pasta, como siempre os digo, pasta fresca o pasta de calidad, y más en platos de cuchara, se nota muchísimo en la textura ya que no se pasa con la misma facilidad, tener en cuenta que el plato al ser caliente y con caldo, la pasta sigue cocinándose, por eso mejor que sea de calidad y dejarla al dente. También una pasta de calidad nos ayudará en la digestión, esta será mucho menos pesada.
Si queremos podemos añadir un poco de ajo, esto le daría un toque más español a esta sopa, pero es verdad que el ajo en los guisos queda muy rico. Yo también le he añadido un poco de cayena en polvo, me encantan las sopas y guisos con un toque picante. El parmesano al servir, mejor que sea abundante, le da un sabor delicioso.
Espero que os animéis con esta sopa italiana vegetariana, os aseguro que os va a encantar, cuando la veáis recién cocinada os va a parecer algo fea (realmente lo es) pero con el perejil y el parmesano, el plato gana mucha alegría en la mesa.