Viernes 28 de Abril de 2017
La Gran Nube de Magallanes es una pequeña galaxia satélite de la Vía Láctea. Contiene muchas regiones donde las nubes de gas y polvo están formando nuevas estrellas. Una de estas regiones, que rodea el cúmulo de estrellas NGC 1929, se muestra en primer plano en esta imagen del VLT de ESO. Esta nebulosa se conoce oficialmente como LHA 120-N 44, o simplemente N 44 para abreviar. Estrellas jóvenes y calientes en NGC 1929 emiten luz ultravioleta intensa y hacen que el gas brille. Este efecto destaca la superburbuja, una gran concha de material de aproximadamente 325 por 250 años luz de tamaño. En comparación, la estrella más cercana al Sol está situada a poco más de cuatro años luz de distancia.
La superburbuja N 44 ha sido producida por la combinación de dos procesos. En primer lugar, los vientos estelares, que son corrientes de partículas que emiten las estrellas muy calientes y masivas en el cúmulo estelar central, que limpian la región de gas y polvo. A continuación, las estrellas masivas del cúmulo explosionaron como supernovas creando ondas de choque y empujando el gas aún más lejos para formar la burbuja y hacer que brille. Aunque la superburbuja está moldeada por fuerzas destructivas, se forman nuevas estrellas alrededor de los bordes, donde se comprime el gas. Esto supone el reciclaje a una escala cósmica, la nueva generación de estrellas respirará nueva vida en NGC 1929.
Sobre éstas líneas vemos una imagen de campo amplio en luz visible de la zona alrededor de la región de formación de estrellas LHA 120-N 44 que rodea el cúmulo NGC 1929, la imagen se ha creado a partir de fotografías tomadas en filtros rojo y azul que forma parte del Digitized Sky Survey 2. La superburbuja aparece cerca del centro y varias otras regiones de formación de estrellas son visibles en la zona circundante. El campo de visión es de aproximadamente tres grados de diámetro.
Fotografía Original 1
Fotografía Original 2Crédito imagen 1: ESO / Manu Mejias
Crédito imagen 2: ESO y Digitized Sky Survey 2