Tan poca vida, para leer y comprender

De cuando en cuando necesitamos tener entre nuestras manos novelas que nos lleven todos los sentidos, que nos lleguen por dentro y despierten en nosotros emociones que llevaban mucho tiempo dormidas. En el caso de Tan poca vida, viajaremos a Manhattan para encontrarnos con nosotros mismos, con la vida a lo largo del tiempo.

En la novela de Tan poca vida encontraremos el hilo de la gran literatura norteamericana, donde aprender de las pausas, del silencio, entender qué pueden llegar a significar las emociones. Algunos dicen que nos encontramos a nosotros mismos, encontramos tantas respuestas que nunca nos han sido respondidas, porque qué dicen los hombres cuando simplemente callan, cuando no dicen nada. Podemos pensar en la vida, en cuánto valor tiene y si ese valor siempre es el mismo, si en algún momento deja de tenerlo.

Cuando nos dispongamos a leer Tan poca vida, podremos acercarnos a cuatro hombres, que crecen juntos en uno de los distritos más emblemáticos de Nueva York, en Manhattan. Tres décadas de amistad son lo que une a estos hombres, pero además, el haber vivido el fracaso y el éxito. Estos cuatro hombres vivirán en plena crisis económica pero además habrán de enfrentarse a crisis sociales y crisis en sus propias vidas.

La autora de este libro, Hanya Yanagihara, encontrará en la manera de relacionarse, de estar juntos, de estos cuatro hombres un sentido para hablar de su vida. La intimidad que se crea entre estos hombres cuando están juntos es tan grande, que sobran las palabras. Los gestos son la base de esta amistad, pero ¿por qué? A través de Tan poca vida tendrás la respuesta a esta y muchas otras preguntas.

Esta novela ha sido una gran revolución, siguiendo el estilo de la literatura norteamericana aporta con esta historia una frescura que ha desatado una auténtica locura en las redes sociales. Son muchos los lectores que se han acercado a Tan poca vida y han quedado más que entusiasmados.