Revista Cocina
Esta tarta la he encontrado en una revista que hay por casa de repostería, lo ha he preparado en forma de Layer pero se puede hacer un solo bizcocho, partirlo y rellenarlo. La crema de relleno es algo diferente a la que viene en la receta pero así queda perfecta, es sencilla de hacer y lo único raro (no raro pero si algo menos usado es el clavo molido y el jengibre) por lo demás es una tarta muy agradecida.
Para el bizcocho necesitamos:
250 gramos de azúcar moreno120 gramos de aceite de oliva suave o bien de girasol160 gramos de harina2 cucharaditas de café de levadura tipo royal (de las más pequeñas)1 cucharadita de canela¼ de cucharadita de clavo molido¼ de cucharadita de jengibre molido3 huevos tamaño L210 gramos de zanahorias ralladas o bien picadas con la picadora80 gramos de nueces en trocitos (yo las he picado)2 cucharadas de cacao puro en polvo
Para el relleno y cobertura:
180 gramos de mantequilla a temperatura ambiente180 gramos de azúcar glas200 gramos de queso philadelphia2 cucharadas de café soluble1 cucharadas de brandy
Para decorar:
40 gramos de azúcar8-10 nueces peladas y en mitades
Precalentamos el horno a 180º con calor por arriba y por abajo.
Mezclamos el azúcar con el aceite y lo batimos con las varillas un par de minutos, luego vamos agregando los huevos de uno en uno.
Ponemos en un cuenco la harina, la levadura, el cacao y las especias, tamizamos bien e incorporamos a la mezcla de los huevos, al mismo tiempo ponemos la zanahoria y las nueces troceadas, batimos un poco para que se integre todo bien
Distribuimos la mezcla en los moldes o en el molde. Yo he usado 3 moldes de 15, se pueden usar dos de 20 o bien uno solo de 22 cm. Vamos lo que tengáis a mano
Horneamos el bizcocho durante unos mínimo 30 minutos para los layer de 15 cm, sobre unos 40-50 si usáis un solo molde, pinchar en el centro para ver si está listo.
Para preparar el relleno pondremos primero la mantequilla con el café soluble y el brandy, batimos bien hasta que se integre, luego ponemos el azúcar glas y batimos con cuidado para no llenar la cocina de azúcar, una vez que esté bien integrado pondremos el queso y volvemos a batir hasta que se integre.
Con el azúcar que tenemos reservado hacemos un caramelo al que incorporamos las nueces troceadas, ponemos un poco de aceite en el mármol o en un plato y vamos sacando las nueces caramelizadas para que se enfríen.
Una vez que tengamos frío el bizcocho lo partimos (en dos o 3 partes dependiendo de la altura que tenga) rellenamos con parte de la crema, con el resto hacemos rosetones con una boquilla 1M de wilton y decoramos con las nueces caramelizadas. Ahora solo queda dejar un ratito en el frío y luego a disfrutar.