Buenos días, ya sé que hoy no toca entrada y que seguramente todos estaréis todos ocupados con los preparativos de reyes, pero quería enseñaros esta tarta que preparé por el cumpleaños de mi abuela por si no os gusta el roscón de reyes tengáis una alternativa para celebrar este día.
Para mi el cinco y el seis de enero han sido mis días favoritos del año aunque este año me toca pasarlos trabajando.
Para esta tarta tuve muchas dudas, mi abuelo siempre ha sido muy goloso, pero no tengo recuerdo de mi abuela comiendo un dulce, alguna vez algún sorbete de limón, así que no tenía muy claro qué preparar aunque sabía que tenía que llevar limón.
Ya sabéis que me encanta la combinación del limón y las semillas de amapola y con el mascarpone tenemos una tarta no demasiado dulce lo que es perfecta para la gente que no es muy golosa.
Ingredientes para el bizcocho
- 195 g de harina
- 200 g de azúcar
- 2 cucharadita de levadura
- 2 cucharadas de amapola
- 125 g de mantequilla
- 150 g de buttermilk (150 g de leche + un chorro de limón o vinagre)
- 3 claras
Ingredientes crema
- 125 g de mascarpone
- 200 ml de nata para montar
- 45 g de azúcar glas
- Precalentamos el horno a 180º.
- En un bol ponemos la mantequilla pomada y el azúcar y batimos hasta tener una crema esponjosa.
- Añadimos las claras y batimos a velocidad fuerte.
- Inocorporamos un tercio de la harina previamente tamizada con la levadura.
- Vertemos la mitad del buttermilk.
- Seguimos con la harina, el buttermilk y el resto de la harina.
- Cuando añadamos la última tanda de harina mezclamos con la ayuda de una espátula con movimientos envolventes.
- Añadimos las semillas de amapola.
- Repartimos nuestra masa en los moldes previamente engrasados. Yo he usado 3 finos de 18 cm, de esta manera no tengo que cortar las capas, pero podéis usar un único molde alto y luego cortar.
- Para mis moldes horneé durante 15 minutos.
- Para la crema mezclamos el azúcar glas con el mascarpone.
- Añadimos la nata y batimos hasta que monte.
- Para el montaje de la tarta ponemos una capa de bizcocho en nuestro plato.
- Ponemos una capa de crema, lo podeis hacer con la ayuda de una manga o con una espátula. Igualamos y colocamos otra capa de bizcocho. Así hasta terminar.
- Decoramos la parte superior y los laterales con crema. A mi me gusta con poca crema, un poco naked cake y con estas cantidades da justo para ese efecto.
- Conservamos en la nevera. Sacamos unos 30 minutos antes de consumirla.
Yo los bizcochos los preparé un jueves, los dejé bien filmados, el viernes hice el relleno y la tarta estuvo en la nevera hasta el sábado que fue el cumpleaños de mi abuela y no se quedó seca, duró perfectamente.
Si celebrais reyes disfrutad mucho del día :)