También cumple años mi amiga Aida, y cuando vi esta receta en Kanela y Limon (un blog que me encantaaaa y que teneis que visitar) lo supe!! Esta es la tarta perfecta para ella!! Esta increiblemente buena, y yo sólo cambié la decoración. También he leido en foros de gente que ha hecho la receta y ponía que habían cambiado la base de galleta por base de bizcocho, ya que la galleta enmascaraba mucho el sabor de la piruleta, he de decir que yo hice la receta original, con galleta y que para nada le quita el sabor, pero lo comento como alternativa, por si a alguien no le gustara la galleta. Bueno ahí va, a ver que os parece...
Ingredientes
- 6 hojas de gelatina neutra
- 1 yogur griego
- 1 y 1/2 medidas de yogur de azúcar
- 5 piruletas
- 50 ml. de agua
- 30 ml. de licor de piruletas
- 350 gr. de nata para montar
- 100 gr. de galletas maria
- 50 gr. de mantequilla derretida
- Piruletas para decorar
Ponemos las hojas de gelatina en agua fria para que se vayan hidratando y las reservamos. Trituramos las galletas, la mezclamos con la mantequilla derretida y hacemos en un molde la base de la tarta, apretando la galleta con ayuda de una cuchara.
Deshacemos las piruletas en trozos pequeños (yo use un mortero).
Ponemos el agua en un cazo al fuego y derretimos las piruletas. Esta es la parte más laboriosa de toda la receta. Una vez están derretidas las retiramos y añadimos la gelatina muy bien escurrida y la disolvemos bien en las piruletas. En un bol aparte mezclamos el yogur, el azúcar y el licor de piruletas y le añadimos la mezcla de las piruletas derretidas. Removemos bien.
Montamos la nata y la añadimos a la mezcla. Incorporamos con movimientos suaves y envolventes para que se incorpore bien.
Volcamos esta mezcla en el molde de la base de galletas y lo llevamos al frigorífico hasta que cuaje o hasta el día siguiente.
Llega el momento de decorar. Me gustó mucho la decoración de Kanela y Limón pero yo decidí cambiarla. Compré muchas piruletas de más y las piqué mucho, reduciendolas a trocitos muy pequeños, casi polvo, y cubrí con ellos toda la superficie de la tarta.
Si decidís decorarla como yo, os aconsejo que la decoreis en el momento de ir a servirla. Yo la hice el día de antes y por falta de tiempo la decoré antes de meterla en la nevera, el polvo de piruleta se humedeció un poquito y formó una especie de sirope (que por otra parte tampoco estaba nada mal) y al desmoldarla empezó a chorrear por los laterales (como se ve en la primera foto). Que el resultado también fue interesante con el sirope, pero creo que hubiera sido aún más bonita si el polvo hubiese estado todo seco. De todas formas al humecerse se formó una capita de piruleta durita pero muy fina y por la que acabaron peleándose y robándose de los platos.
Yo de todas formas lo informo para que os aprovecheis de mi experiencia... El resultado fue una tarta muy rica y con un sabor increible que os recomiendo que probeis. A disfrutaaaaar!