Revista Deportes
No pude evitar el pasado martes, viendo retirarse lesionado y cojeando al duro y gigantón John Terry en el transcurso del Atlético de Madrid – Chelsea, recordar su tristeza tras la final de la Champions de 2008. Llegaban a aquella final dos equipos ingleses: Manchester United y Chelsea. En un bellísimo escenario, el estadio Luzhniki de [&hellip