Revista Cultura y Ocio

Texas se prepara para resistir una invasión

Por Igork
Texas se prepara para resistir una invasión Auténticos patriotas y defensores de la libertad y la democracia alertan de una posible invasión de Texas. El gran Chuck Norris,  reconocido actor de culto, vuelve a primera página a los 75 años. Norris es uno de los que ahora siembra la alerta por una posible invasión del estado de la estrella solitaria, Texas. ¿Son los mexicanos que apuntan sus armas hacia el norte? ¡No! ¡Error! Texas teme una invasión del ejército federal norteamericano, cuyo jefe es un reconocido lagarto (así lo creen un porcentaje muy alto de estadounidenses), Barack Obama, el inventor de “drones para todo el mundo”. Que el ejército federal cuente con varias bases militares en Texas parece un asunto secundario.
El enemigo que acecha a Texas es el mismísimo ejército federal de Estados Unidos, que se infiltraría en parte con la colaboración de la cadena Walmart. La empresa habría facilitado la construcción de túneles en sus establecimientos para que los uniformados entrasen clandestinamente. Y además de esconder a los invasores, por los túneles de Walmart se podría llevar a los detenidos (Tejanos, se entiende) a paraderos desconocidos. Todo está muy claro. No quieren permitir a los tejanos que hagan lo que les dé la gana.
Texas se prepara para resistir una invasión
Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca, ha tenido que negar la supuesta ocupación. Pero seguro que es otra mentira de los federales. El gobernador Greg Abbott y el aspirante a la presidencia, el senador Ted Cruz, han avalado la amenaza en lugar de desactivarla, por esos dos sí son defensores de verdad de la “libertad y la democracia”. El punto de partida son unas maniobras militares bautizadas con el nombre Jade Helm 15 que se desarrollarán entre mediados de 
julio y de septiembre.
Los texanos lo ven como un plan secreto para imponer la ley marcial, requisar las armas de los ciudadanos, arrestar a los políticos indeseables, hacerse con el control del Estado, o todo combinado. El gobernador Abbott ha pedido a la Guardia Nacional que vigile a las tropas federales. Aunque este cuerpo, más bien poco armado y poco en forma, lo tendrá complicado para seguir y vigilar a los Boinas Verdes, algo más entrenados.

El contingente militar se desplegará por ocho estados para realizar prácticas de combate. Lo harán en instalaciones militares y en terrenos privados, tras recibir autorización de los propietarios. La topografía de la región es ideal por su similitud con zonas conflictivas en el extranjero.
El Departamento de Defensa define esos enclaves elegidos como "áreas remotas". Asegura que lo más destacable para los residentes locales será un mayor número de vehículos por las carreteras y el incremento del tráfico aéreo, con el consiguiente ruido.
Texas se prepara para resistir una invasión
Esta iniciativa llegó, sin embargo, a oídos de Alan Jones, cineasta y radiofonista cuyo programa Inforwars lanzó la alerta al ver un mapa de estas maniobras. En ese documento, Texas, Utah y parte del sur de California aparecen en rojo y con la etiqueta "territorio hostil". Jones empezó a hacer correr la teoría de que esa catalogación era real, y no un juego de guerra, y que lo que preparaba la Casa Blanca era una intervención para acabar con la "insurgencia doméstica". Entre los perseguidos incluyó a "libertarios, constitucionalistas y patriotas".
Su elucubración tomó cuerpo y otras webs de ideología similar como Oath Keepers o World Net Daily (WNT) arrimaron el hombro. "Internet va lleno de especulaciones de que estos ejercicios no se han diseñado para preparar a las tropas de cara a ir a otros países, sino para hacer operaciones contra los estadounidenses", se lee en Oath Keepers. En WNT, Norris apostilla: "El Gobierno dice que 'sólo es un ejercicio de entrenamiento'. Pero no estoy seguro de que la palabra 'sólo' sea una referencia a la realidad cuando la utiliza el Gobierno".
Todo esto podría haberse quedado como una manifestación más de la reivindicación de la personalidad texana, Estado que gozó de independencia entre 1836 y 1845 y que todavía mantiene a nostálgicos agrupados en la llamada "Republic of Texas". El concepto de secesionismo se ha empleado, además, como expresión del rechazo visceral a Obama por una parte de la población.
Pero la intervención del gobernador le dio una vuelta de tuerca. Abbott remitió la pasada semana una directiva al general Gerald Betty, comandante en jefe de la Guardia Nacional, para que controle las maniobras.
"Es importante que los texanos sepan que su seguridad, derechos constitucionales, propiedad privada y libertades civiles no serán lesionados", le indicó a Betty.

Su pronunciamiento alentó las críticas incluso entre colegas republicanos. Rick Perry, su antecesor en el cargo, arremetió contra su sucesor. "A los líderes civiles los puedes cuestionar siempre, pero no a los hombres y mujeres que visten el uniforme", sostuvo el halcón Perry en declaraciones al Dallas Morning News.
Aunque otros republicanos hablaron de "escandalosa extensión del fanatismo", Ted Cruz, vinculado al Tea Party, salió en apoyó del gobernador y de los conspiradores. En una entrevista para la agencia Bloomberg, el senador por Texas entendió la preocupación por cuanto el Gobierno federal ha sido durante estos seis años "irrespetuoso con la libertad de los ciudadanos".
Así que hasta el Pentágono se ha visto obligado a desmentir la invasión. El teniente coronel Mark Lastoria emitió un comunicado para especificar que estos ejercicios dentro de las propias fronteras "son frecuentes".
Lastoria se desplazó a Bastrop, a unos 50 kilómetros de Austin, la capital, para tranquilizar a los parroquianos. A la reunión asistieron unos 200 lugareños. "Podrán tener asuntos con el Gobierno federal -les comentó-, pero esta institución ha estado con ustedes por más de 240 años".

Fuentes: La Vangurdia y El Mundo


Share/Bookmark

Texas se prepara para resistir una invasión


Volver a la Portada de Logo Paperblog