Días antes de la Ceremonia de los Óscars, llamaba la atención en este blog sobre la creciente posibilidad de que una película cristiana, The Blind Side, se llevara el Óscar a la mejor interpretación femenina. Era una buena noticia, pues ese papel transmitía a la audiencia un precioso abanico de valores positivos: generosidad, valentía, coraje, entrega a los demás… Y lo transmitía, entre otras cosas, porque le respaldaba una profunda y sincera fe cristiana.
La mejor noticia fue que, en efecto, Sandra Bullock se llevó el Óscar, como antes se había llevado el Globo de Oro y otros premios a la mejor interpretación del año. Ahora se estrena en España, y los críticos subrayan, de nuevo, la viva y sincera religiosidad de esta “madre coraje” co,mo uno de sus mejores valores. Esto es lo que dice Juan Orellana en su crítica:
“The blind side es un canto muy positivo a la familia, especialmente a la familia cristiana, y ensalza las dimensiones de apertura, acogimiento y caridad de la misma. También el film pone en valor las instituciones educativas de ideario cristiano, y señala el valor constructivo y estabilizador del trabajo deportivo. Antropológicamente, la película pone el acento en aspectos verdaderos como el agradecimiento, la compasión, el sacrificio, el perdón, la fe en el otro, la paciencia...”.
Con todo, me gusta más esta crítica de Claudio Sánchez, publicada en Fila Siete, que ofrece un panorama más completo. Al final incluyo la ficha técnica y una foto de la verdadera familia Touhy y del auténtico Michel Oher, sobre cuyas historias reales se ha construido este filme. También os dejo el tráiler, muy revelador de su contenido. Como siempre, espero vuestros comentarios al pie.
Crítica de Filasiete:
Pocas cosas les gustan tanto a los norteamericanos como las películas basadas en la superación personal de un deportista. Desde Rocky a The blind side, pasando por Hoosiers, Titanes o Camino a la gloria, el cine norteamericano se ha hecho verdaderamente especialista en este género. El mismo director de esta película ya había dirigido la eficaz The rookie, basada en la historia real del mítico entrenador de béisbol Jim Morries.
Esta vez la narración (también basada en hechos reales), cuenta la historia de Michael Oher, un joven afroamericano sin hogar que encuentra ayuda y cobijo en una familia blanca dispuesta a prestarle el apoyo necesario para que pueda triunfar como jugador de fútbol americano y en la vida. Por su parte, Oher también influirá en la vida de los miembros de la familia Touhy.
La diferencia principal de esta película con respecto a otras es que se centra más en la evolución dramática del personaje que en la mejora deportiva. Se presta poca atención al campeonato y se da mayor importancia a la influencia de Michael en una familia que tiene, en principio, de todo. En este sentido Sandra Bullock está sobresaliente en un papel dramático con el que ha ganado casi todo (Oscar, Globo de Oro, etc.), algo que demuestra que es una actriz estupenda cuando se la controla (como es el caso) e insoportable cuando no es así (véase Loca obsesión).
La película se atreve a contar una historia bonita, muy bonita, sin miedo al sentimentalismo, que evita con bastante elegancia. Además, la cinta tiene un buen ritmo narrativo que hace que las dos horas se pasen en un suspiro. Poco más habría que decir: es una película entretenida que cumple lo que pretende. Así lo aseguran los más de 255 millones ingresados en Estados Unidos (la cinta más taquillera de todos los tiempos protagonizada por una mujer).
¿Y por qué ha tardado meses en llegar a España? Porque es una película muy norteamericana. Esto hace que las motivaciones de los personajes sólo se entiendan desde la óptica de una familia cristiana evangélica norteamericana, que practica una solidaridad cristiana bastante admirable, silenciosa, sin aspavientos. No se oculta la religiosidad, pero tampoco se subraya. Una manera ciertamente insólita de acercarse a este asunto en el cine actual.
Además, la película es positiva y amable sin negar una actitud crítica. Así lo vemos en una de las mejores escenas del film, en la que el matrimonio protagonista se plantea sobre si realmente hay rectitud en su ayuda a Michael o buscan algo más que la felicidad del chico. Este giro hace la cinta más madura y matizada, poniéndola por encima de la simpleza voluntarista de la mayoría de las películas deportivas.
No es una obra maestra porque hay baches del argumento no bien resueltos a mitad del metraje, varios personajes secundarios poco desarrollados y la música de Burwell (uno de los grandes, sin duda) es redundante y carente de personalidad y emoción. Pero es una película sincera que podía caer en muchas trampas de moralina fácil y, sin embargo, mantiene con dignidad un discurso interesante y necesario gracias al notable guión del propio Hancock (el segundo más interesante de su filmografía, después del magnífico libreto que escribió para la película de Clint Eastwood Un mundo perfecto).
Claudio Sánchez
Ficha técnica:
Dirección: John Lee Hancock.- Guión: J. L. Hancock.- Fotografía: Alar Kivilo.- Montaje: Mark Livolsi.- Música: Carter Burwell.- Intérpretes: Sandra Bullock, Tim McGraw, Quinton Aaron, Jae Head, Lily Collins, Ray McKinnon, Kim Dickens, Kathy Bates, Catherine Dyer.- Distribuidora: Warner.- Duración: 128 minutos.- Público Adecuado: Jóvenes.