Revista Cocina
Una buena ración de jamón ibérico extremeño, unas tapas con anchoas del cantábrico y tomate y un par de quesos con un puñado de almendras. Con estas viandas en la mesa, estaba claro qué tipo de vino debía hacer su aparición.Como cada año desde hace diez, al llegar la primavera Antonio Flores selecciona en la bodega La Constancia aquellas botas que destacan por sus especiales características y complejidad. En esta ocasión han sido seleccionadas 67 botas para que vea la luz Tío Pepe Fino en Rama 2019 (DO Jerez-Xérès-Sherry, generoso 100% Palomino, González Byass) que, como ya hemos dicho, se embotella sin clarificar, estabilizar ni filtrar. Botas en las que la levadura ha crecido con fuerza, dando lugar a un velo de flor grueso, lo cual marca la personalidad de este vino.Es un vino de color amarillo pajizo dorado, intenso y brillante. En nariz en intenso, quizás menos punzante que otras añadas, con los esperados aromas de levaduras y frutos secos, pero con un claro fondo cítrico muy alegre. En boca se revela lleno, seco, con una acidez fantástica, intenso salino y de nuevo con ese punto cítrico.Esta es la tercera añada que pruebo de este vino, me ha parecido quizás el más intenso hasta ahora, y como ya dije, me engancha cada vez más. Seguiremos disfrutándolo.