Revista Cultura y Ocio
Toni Erdmann de Maren Ade (2016)
Publicado el 08 febrero 2017 por Miguel Angel Requejo Alfageme @MiguelARAlfagemEste intento de Maren Ade de explicar que es lo que le da sentido a la vida contándonos la historia de un padre atrabiliario e inclasificable que se pone manos a la obra cuando ve a su hija ejecutiva, perdida y nada feliz, en un mundo frío y feroz del que todo sea dicho el no ha salido muy bien parado, da como resultado un collage de escenas que no consiguen vertebrar un guión bien trabado pero sí sumergirnos en un universo de estupefacción y contrastes que si nos paramos a analizar escena por escena seguramente nos llevará a poder ver en este film trozos de innumerables cineastas del pasado, pasando por el neorrealismo, el absurdo, el ensimismamiento, el surrealismo y hasta conatos de suspense y misterio. Esta historia, a veces sorprendente, a veces insólita, a veces extravagante, a veces misteriosa, a veces divertida, a veces desternillante, este ejercicio de irregularidad cinematográfica da, paradójicamente, como resultado una película fascinante, pues en ningún momento, ni tan siquiera al final se hace previsible. Lo que hoy en día, en que todos somos espectadores más o menos avisados, se agradece mucho.Se agradece mucho sentarte y preguntarte a cada momento hacia dónde va la historia y pasar de estar conmovido a soltar una carcajada. Como se ve un desarrollo poco regular que requiere de un guión muy artificioso más al servicio en algunos momentos del gag que de la historia. Pero aún así, cuando sales de la proyección y ya tienes en la cabeza toda la película no puedes por menos que aceptar que el director ha estado muy acertado. La vida no tiene sentido así que procura seguir tus instintos. No es moral, no pretende dar lecciones, sólo exponer una situación. No hay soluciones, sólo seres indefensos, débiles, que buscan el abrazo y el calor de otros seres.Que mientras eso pasa o no pasa, viven, y que cuando no reciben la visita de un “Toni Erdmann”, ellos mismos se hacen pasar por un “Toni Erdmann”. Ahora mismo sin ir más lejos, en unos días nuestras calles se llenarán de “tonierdmanns”.Vayan a verla aunque sólo sea para ser sorprendidos.