Teniendo familia en Soria os podéis imaginar que uno de los mayores manjares que me gusta disfrutar son sus magníficos Torreznos, que si no habéis probado os invito a ello.
Son un auténtico manjar, super crujientes por fuera y con un interior suave y sabroso...
Hoy como homenaje voy a preparar unos torreznos comprados en el Mercadona al que le vamos a dar un toque, para que se parezcan lo más posible a los auténticos sorianos.
- Aceite de girasol (o de oliva suave)
PREPARACIÓN:
Lo primero será sacar la panceta de su bolsa y dejarla en el frigorífico durante 3 días para que la piel se seque. Orear la panceta es hará que quede mucho más crujiente.
Pasados los 3 días vamos a cortar la panceta en trozos a nuestro gusto. Se pueden hacer cuadrados pequeños, más grandes, alargados...como más nos guste. En esta ocasión cuadrados no muy grandes.
Ahora ponemos un poco de aceite en una sartén y colocamos nuestros trozos con la piel sobre la sartén y la tendremos al mínimo durante 30 minutos.
Pasado ese tiempo la piel se habrá llenado de pequeñas ampollas. Ahora las metemos en un tupper y las llevamos al congelador 20 minutos. De esta forma estarán frías cuando vayamos a darle la fritura definitiva.
Para acabar ponemos un cazo alto con aceite de girasol y con el aceite frío ponemos la panceta. A continuación ponemos el fuego al máximo y freímos exactamente 5 minutos. Durante ese tiempo los iremos moviendo de vez en cuanto para conseguir que se frían por igual.
Retiramos del fuego y los pasamos por papel absorbente.
Y ya podemos disfrutar de esta maravilla.Vais a ver como quedan muy crujientes y con un interior jugoso y riquísimo.
¿Os animáis a probar?