Hoy les he preparado a mis hijos una deliciosa merienda de tortitas o frisuelos de plátano. Tenía unos plátanos un poco feos y he utilizado dos de ellos para elaborar estas tortitas veganas, que como además llevan leche de soja, sirven para los intolerantes a la lactosa.
No tenéis más que comerlas recién hechas con un acompañamiento de sirope de caramelo, chocolate o, simplemente, un poco de miel.
Para un montón de tortitas (que sobre masa para el desayuno):
- 2 plátanos maduros
- 2 vasos de leche de soja
- 1 vaso de harina de repostería (contiene una pizca de bicarbonato)
- 1 vaso de harina de trigo normal (pueden ser los dos de harina normal)
- 2 cucharadas soperas rasas de azúcar
- ralladura de limón
- aceite para engrasar la sartén
Se pone en el vaso de la batidora el plátano pelado y troceado. Se agrega la leche de soja (si no tenéis podéis añadir leche de vaca), el azúcar y la ralladura de limón.
Se bate enérgicamente hasta que quede una masa homogénea, sin grumos.
Se calienta una sartén con una pizca de aceite. Se pone un cucharón de masa y se deja que se haga la tortita por un lado, bajando un poco el fuego. Le damos la vuelta cuando empiecen a salir burbujas en la tortita.
Se deja un poco de tiempo por el otro lado y se reserva en un plato. Se hacen el resto de las tortitas. Dependiendo de la masa que agreguéis, así os saldrán de grandes las tortitas.
Se acompañan de miel o sirope al gusto.