El oscarizado director de Slumdog Millionaire y 28 Días Después regresa a los ambientes más turbios con un nuevo proyecto para la gran pantalla, Trance. Danny Boyle, que ahora mismo se encuentra inmerso en su obra teatral sobre Frankestein, tiene planeado ponerse a rodar en septiembre y nuevamente con Londres como escenario elegido para el film, un thriller impregnado de esos entornos chungos y sombríos con los que nos deleitó en peliculones como Shallow Grave y Trainspotting. La producción sufrirá un parón y la retomará en enero, por lo que se calcula que la cinta no será estrenada hasta la primavera de 2013. Este kit-kat es debido a que Boyle tiene la misión de dirigir los Juegos Olímpicos del año próximo, lo que le obliga a aplazar algunos de sus planes. Deseosos estamos de conocer más acerca del proyecto, seguiremos informando.
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